El vicepresidente primero de la Ciudad Autónoma, Miguel Marín, expresó ayer su satisfacción por la condena contra líder de la oposición y presidente de Coalición por Melilla (CPM), Mustafa Aberchán, por un delito continuado de calumnias cometido en 2010. Marín consideró que la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2, avanzada ayer por MELILLA HOY, corrobora que la oposición se ha dedicado en los últimos años a “la política rastrera, de tierra quemada y del todo vale” contra el Gobierno local. Marín confió en que tras esta sentencia al líder de la oposición vengan otras en idéntico sentido contra quienes desde la oposición “se han dedicado a injuriar, calumniar y difamar a los miembros del Gobierno y sus familiares”, ya sea públicamente o detrás de pseudónimos en las redes sociales.
En este sentido se refirió al caso Salander, el perfil falso de Facebook y Twitter por el que fueron detenidas varias personas. “Los nombres que conocemos hasta ahora son personas relacionadas con PPL”, recordó ayer Marín, que dijo no estar sorprendido por ello porque era algo que desde el PP y el Ejecutivo local se imaginaban. “No hacía falta ser muy inteligente para pensar que este partido estaba detrás de todo esto”, afirmó el vicepresidente al recordar cómo el presidente de PPL, “el inhabilitado y condenado Ignacio Velázquez, aplaudía y jaleaba a estos pseudónimos en las redes sociales”, comentó Marín.
Por ello, expresó el deseo y la esperanza de los populares en que “la Justicia, más pronto que tarde”, también se pronuncie sobre quienes estaban detrás de estos perfiles falsos en las redes sociales porque “amparados en el anonimato, han vejado, injuriado y calumniado a los miembros del Gobierno y sus familiares”.
El caso Salander es, para Marín, otro episodio similar al de “la política rastrera y del todo vale” que ha llevado a cabo la oposición en los últimos años y que, aseguró, ha quedado corroborada con la sentencia emitida por el Juzgado de lo Penal número 2 de nuestra ciudad sobre los hechos ocurridos en un Pleno de Control el 26 de marzo de 2010. Aberchán fue expulsado, y sus compañeros de CPM y PSOE le acompañaron en solidaridad, tras afirmar que Marín estaba relacionado con el narcotráfico.
El vicepresidente primero del Gobierno local no quiso recordar ayer estas calumnias reconocidas por la jueza y que han sido reflejadas en el auto, aunque sí especificó que atentaban contra su integridad moral y que fueron pronunciadas tanto en la celebración de un pleno de la Asamblea como en un programa de televisión.
“Se ha hecho justicia”
Marín dijo estar satisfecho porque considera que “se ha hecho justicia” por “las injurias y calumnias” que dice haber sufrido y padecido durante los últimos años por parte de los miembros de la oposición, en este caso de Mustafa Aberchán. De hecho, recordó que son varias las denuncias que ha presentado ante los tribunales para intentar defenderse, muchas de las cuales aún están pendientes de juicio y sentencia.
Marín considera que “ha quedado acreditado ese daño moral” contra su persona y Aberchán “va a tener que pagar como se paga en un Estado de Derecho, cumpliendo las sentencias judiciales”. En este caso, la Justicia condena al líder cepemista a una pena de multa de 12 euros diarios durante 24 meses y a una indemnización por daños morales que se eleva a 18.000 euros, así como al pago de las costas procesales.
Contra esta sentencia cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial, aunque Miguel Marín cree que “va a ser difícil que algún magistrado la revoque” por “la contundencia de los hechos probados y los fundamentos jurídicos” recogidos en el auto del Juzgado de lo Penal número 2, de los que dijo que son “realmente demoledores”.
