Parte de los inmigrantes que lograron saltar la valla de Melilla ayer de madrugada utilizaron una escalera colgante fabricada de manera artesanal con cuerdas y palos pequeños, enganchada con una especie de ancla metálica a la parte alta del perímetro fronterizo que divide España y Marruecos.
Esta escalera es uno de los objetos intervenidos por la Guardia Civil en el lugar donde se produjo el intento de entrada, en el que participaron más de 100 subsaharianos, y en el que consiguieron su objetivo alrededor de una veintena.
La Comandancia de la Guardia Civil distribuyó unas fotografías de los objetos que portaban los inmigrantes, entre los que había también numerosos garfios, algunos de ellos muy afilados para engancharlos en los pequeños agujeros de la alambrada.
Los garfios, elaborados de manera artesanal, son utilizados por los inmigrantes para ayudarse en la escalada de las vallas, de seis metros de altura, sobre todo desde que, hace unos años, el Ministerio del Interior reforzó el perímetro con las mallas antitrepa.
También con ese objetivo, los inmigrantes colocan tornillos en las suelas de las zapatillas, que se encuentran, asimismo, entre los objetos intervenidos por la Guardia Civil, además de varios palos de madera.
