Partido vibrante el que se pudo presenciar ayer tarde en el Pabellón Lázaro Fernández, con dos equipos que buscaron en todo momento la portería contraria. Los de Gabi González encadenan su tercera victoria consecutiva y, a su vez, logran la primera en casa. La Peña Barcelonista sumó su primera victoria en casa de la presente temporada, tras vencer ayer al C.D. Maristas por el merecido resultado de 5-3.
Partido vibrante el que se pudo presenciar en el Pabellón Lázaro Fernández, con dos equipos que buscaron en todo momento la portería contraria. Los azulgranas comenzaron llevando la iniciativa en el juego, gozando, además, de varias oportunidades claras para marcar, sobre todo a cargo de Wari, que primero no supo definir ante la media salida del portero granadino y, a renglón seguido, envió el balón al travesaño. Sin embargo, del posible 1-0 se pasó al 0-1, en una jugada desgraciada, en el minuto 4, del meta Bilal, quien, tras un saque de esquina y tocar el esférico en Pablo Avellaneda, intentó coger el mismo y se le escurrió de las manos.
Los melillenses se recuperaron del mazazo y, en el 8’, Dani Melgar conseguía el gol del empate. Este tanto envalentonó a los locales, que pudieron adelantarse en el marcador por mediación de Ilies, que tiró fuera a puerta vacía. Los nazaríes, bien posicionados atrás, lograban el 1-2, en el 10’, en una acción de contraataque, obra de Gabi al culminar en el segundo palo. Para los barcelonistas supuso un auténtico jarro de agua fría, más aún cuando dos minutos después los visitantes ponían más tierra de por medio en el luminoso, otra vez al aprovechar un contragolpe, siendo Jorge el autor del gol.
Los de Gabi González no arrojaron la toalla y eran capaces, en apenas un minuto (entre el 15 y el 16), de nivelar la contienda gracias a los tantos de Tete y Adri del Rosario. Wari, incluso, pudo situar a los suyos arriba en el electrónico antes de llegarse al intermedio con un disparo al palo. Con empate a tres finalizó el primer periodo.
En la reanudación, la Peña Barcelonista imprimió un mayor ritmo a su juego desde el inicio y dispuso de buenas ocasiones en estos primeros compases, sobre todo por parte de Pablo Avellaneda y Tete, quienes siempre encontraron en sus tiros algún jugador contrario que, con una gran dosis de fortuna, evitaba que el balón entrase. Bilal también tuvo que realizar una doble parada salvadora. El marcador se mantuvo inamovible hasta el minuto 29, cuando Mario logró el 4-3 al entrar al segundo palo y remachar al fondo de las mallas. En pleno dominio de los peñistas, Asis, con un disparo ajustado, colocó el 5-3.
Con el resultado favorable, los peñistas fueron los que adoptaron la postura de aguantar y salir a la contra, mientras que el Maristas asumía el papel de llevar el control del encuentro, todavía más con la utilización del portero jugador a cuatro minutos del final. Los melillenses defendieron a la perfección y pudieron hacerse hasta con un triunfo más holgado.
