La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) y Andalucía Acoge, con ocasión del Día Internacional contra la Trata de Personas con Fines de Explotación Sexual, lamentan la "escasez" de recursos existentes para luchar contra este problema, toda vez que denuncian que las víctimas "no están siendo debidamente protegidas", puesto que cuando se trata este tema "se busca más la persecución del delito que la protección de la víctima". Además dan la voz de alarma por el cada vez mayor número de menores que llegan en pateras y desaparecen de los centros de acogida. La presidenta de Andalucía Acoge, Silvia Koniecky, señaló que se trata de una realidad "muy invisibilizada" porque "hay mucho miedo por parte de las víctimas", al tiempo que asegura que desde todas las entidades "se está denunciando que las víctimas no están siendo debidamente protegidas", puesto que cuando se trata este tema "se busca más la persecución del delito que la protección de la víctima".
En este sentido señala que para que una persona sea protegida "tiene que dar información sobre quién la ha puesto ahí", y en Andalucía "existen muy pocos recursos de pisos donde estén debidamente protegidas, con situaciones en Jaén en que la persona denunciada tenía derecho a saber quién y dónde residía la persona que le había denunciado". Así, reitera que desde las organizaciones sociales se está pidiendo "una mayor cobertura de la protección de la víctima, pero que además se prime por encima de la persecución del delito".
Con respecto a otras comunidades, la presidenta de Andalucía Acoge ha señalado que en algunas como Baleares "se han tomado medidas muy inteligentes, con una protección de las víctimas", pero en Andalucía "lo que hay es insuficiente". Al respecto, añade que "no es una realidad muy distinta a la que pueda haber en otras comunidades", pero se trata de realidades de una "vulneración extrema", donde estas mujeres "están absolutamente sometidas por la organización".
Los menores
Además, alerta de que en las costas "hay una realidad muy alarmante e invisible de menores que llegan en pateras, que algún día desaparecen del centro de menores y no se sabe más de ellas", y aclara que la trata "ocurre en el caso de la explotación sexual pero también en el caso de las personas con fines de explotación laboral".
Por su parte, la coordinadora del área de prostitución de la Apdha, María José Serrano, ha reclamado la diferenciación del trabajo en la prostitución como un ejercicio laboral y lo que son las personas víctimas de trata de explotación sexual. "Aún hoy las administraciones tienden a confundir estos dos conceptos y lógicamente cualquier tipo de intervención no es acertada", porque la persona víctima de trata necesita "protección y sacarla de la red en la que está".
Serrano asegura también que esta protección tendría que "ser extensible" a su familia aquí y en su país de origen, "y en este momento esto no se está haciendo", toda vez que afirma que en Andalucía los recursos destinados a eliminar esta lacra "son escasos" y "están casi siempre condicionados a una denuncia por parte de la víctima".
Por tanto, Serrano apuesta por proporcionar, sobre todo, recursos donde "las mujeres se puedan sentir seguras, que sean ágiles, donde no tengas que esperar a que haya un intervención; si una mujer te dice que está siendo víctima de trata hay que creerla y poner en marcha todos los mecanismos de forma urgente, no solo para defender a la mujer aquí sino hacer también en su país de origen donde su propia familia puede estar sufriendo presiones".
