La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha destacado los medios con los que cuenta Melilla para responder ante una emergencia en caso de catástrofe, además de la implicación de su personal militar, de emergencias y voluntarios.
El capitán Tejero, jefe del subgrupo táctico de la UME que ha intervenido en el simulacro multirriesgo de nivel 2, ha sacado esta conclusión de los dos días de ejercicios que se han desarrollado en Melilla, donde se ha simulado un gran terremoto con réplicas y un maremoto que afectaba a toda la ciudad.
A partir de ahí, 220 profesionales y 50 vehículos de unidades de seguridad y emergencias nacionales y locales se han movilizado para la realización de diferentes ejercicios, entre ellos apuntalamientos de edificios, rescates de heridos, vehículos caídos al cauce del río y al mar, además del montaje de un albergue en la zona alta de la ciudad.
El capitán de la UME ha afirmado que, aunque ninguna ciudad está preparada para una catástrofe como la que se ha planteado en este simulacro, se va satisfecho de Melilla al comprobar los medios de los que dispone para responder ante una emergencia y, sobre todo, ha destacado la implicación de todo el personal que ha intervenido.
La UME ha intervenido en este simulacro con 99 efectivos y 36 vehículos pesados y ligeros, además del despliegue de numerosos medios, despertando cierto temor en la unidad por ser época de inundaciones y tener desplazado en Melilla la mayor parte del batallón para la realización de estos ejercicios.
El capitán Tejero también ha destacado el “esfuerzo tremendo” que ha realizado la Comandancia General de Melilla (Comgemel) para la realización de este simulacro multirriesgo, ya que un mínimo de 80 de sus militares ha participado en él, además de otras muchas en las semanas previas, y han desarrollado ejercicios como el montaje de un puente y de un albergue de emergencia.
Además, el responsable de la UME ha puesto de relieve la implicación del Batallón de Zapadores, ya que los regimientos de ingenieros disponen de “medios ideales” para intervenir en emergencias como las que se han ensayado en este simulacro.
“Lecciones aprendidas”
Entre las “lecciones aprendidas” estos días durante el desarrollo de los ejercicios, y que servirán para perfeccionar de cara a otros futuros que se realicen, el capitán de la UME ha destacado la necesidad de mejorar la estructura de mando y control, para lo que se establecerá un sistema de transmisiones conjunto.
Y en cuanto a las dificultades técnicas, se ha referido a las incidencias en estructuras colapsadas que requieren una formación muy específica y la participación de ingenieros politécnicos para “no arriesgar la vida de los intervinientes, aparte de las víctimas de la catástrofe”.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, ha dado las gracias a todas las unidades que han participado en este simulacro y les ha expresado su felicitación, ha sugerido que los próximos estén orientados a las capacidades de respuesta que hay en Melilla para “explorar eso un poco más y poner a prueba las fuerzas” con las que se cuenta en la ciudad.
Comunicación
Además, considera que se debería implantar un protocolo de comunicación de crisis para que los medios de comunicación puedan participar de manera más directa y trasladar la información a la población de una manera coordinada, dado que “son esenciales a la hora de informar” en caso de catástrofe, haciendo “una labor de mediación entre realidad y sociedad”.
El capitán de la UME ha coincidido en que los medios de comunicación son “fundamentales” y han podido comprobar en catástrofes en las que ha intervenido esta unidad, como los incendios forestales, que “con una correcta cadena de información todo va mejor” y “hay una enorme diferencia entre una población bien informada y otra mal informada”.
