La Semana. MH, 14/08/2023
Por: J.B.
La táctica del miedo
“Tengo miedo” es una famosa canción compuesta por el maestro Solano para “La más Grande” (Rocío Jurado), que la grabó con Columbia en 1965. Es uno de los iconos musicales que más se identifican con la cantante chipionera. Más de 100 conocidos cantantes (Chayanne, Los Bríos o Marifé de Triana, son algunos de ellos) han cantado diferentes versiones de la conocida canción. En el tema se retrata fielmente ese miedo que nos desencadena en ocasiones el amor, tan solo de imaginar que lo perdemos.
Los listos esos de ahí arriba (que diría Vicente Hernáez, de Marca), o lo que es lo mismo: el PSOE de Pinocho y compañía, con la marioneta Félix Bolaños a la cabeza (antes ministro de la Presidencia y ahora lo mismo en funciones); han aprendido a usar el miedo para conseguir mantenerse en el sillón a toda costa.
Los listos esos de ahí arriba han aprendido a usar el miedo para conseguir mantenerse en el sillón a toda costa
La táctica de Sánchez y su PSOE (se podría bautizar, por desgracia, al actual PSOE, dado el control absoluto de Sánchez sobre todo lo que se mueve dentro, como Partido Sanchista Obrero Español; aunque lo de “Español” se va diluyendo en función de sus intereses) se basa en promover el miedo a Vox y hacer creer a los ciudadanos tres falacias: 1) que votar al PP y a Vox es votar a las mismas políticas; 2) que un gobierno del PP, o del PP con Vox, va a acabar con el estado del bienestar; 3) que la economía se va a derrumbar si llega el PP (nos hacen creer, promoviendo constantemente el miedo a ello, que un cambio supondrá el fin de las pensiones, una recesión, que los funcionarios cobren menos, que se perseguirá a los colectivos LGTBI, etc.).
Ha conseguido (Pinocho Sánchez) embaucar a muchos para mantener todavía una posibilidad, pese a haber perdido las recientes elecciones, de mantenerse en el gobierno, con el apoyo del diablo si hace falta. Algunos han comprado el relato a Sánchez y les ha podido el miedo (en este caso no han tenido miedo a perder a su amor, tuvieron miedo de perder su pensión recientemente subida, su salario de funcionario recientemente subido, su posibilidad de meterse en la casa que les de la gana para ocuparle y quedarse unos añitos, etc.).
El miedo a lo desconocido (aunque presumiblemente vaya a ser mejor, porque hacerlo peor es prácticamente imposible) ha triunfado frente al miedo a lo malo conocido
El miedo a lo desconocido (aunque presumiblemente vaya a ser mejor, porque hacerlo peor es prácticamente imposible) ha triunfado frente al miedo a lo malo conocido. “Miedo, tengo miedo, miedo de quererte. Miedo, tengo miedo, miedo de perderte…” (fragmento de la canción).
Melilla y Ceuta: una piedra en el zapato
El Real Decreto Ley 1/2023, de 10 de enero, modifica en su artículo 31 el régimen actualmente vigente de bonificaciones a la Seguridad Social en las dos ciudades autónomas. Con su entrada en vigor (en septiembre), el descuento del 50% vigente deberá sustituirse por un importe fijo de 262 euros al mes, condicionado al seguimiento de acciones formativas de 20 horas al año. Un escenario que la Ciudad, los empresarios y los sindicatos juzgan perjudicial para los intereses económicos de Melilla.
El Real Decreto Ley 1/2023 no mejora lo que había y tampoco lo mejora el Real Decreto 660/2023, de 18 de julio, por el que se regula la concesión directa de subvenciones a empresas (la gestión de estas subvenciones correrá a cargo del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE)) de determinados sectores que tengan personas trabajadoras con contratos indefinidos en las ciudades de Ceuta y Melilla.
Se echan de menos movilizaciones y protestas en Ceuta y Melilla contra medidas que nos van a hacer todavía más difícil la vida a los melillenses y a nuestras empresas. Con las nuevas normas se pretende más control (unido a mucha más burocracia), se introduce la arbitrariedad (¿Cuáles serán los “sectores determinados” a los que se refiere el Real Decreto 6660/2023?) y se obliga a las empresas (para quedarse peor que antes) a la realización de acciones formativas.
El gobierno comunista de Pinocho se empeña en seguir tutelándonos como si fuésemos niños de 2 años. Si antes era una bonificación directa, ahora dependerá de muchas variables (que probablemente hagan que la gran mayoría esté peor) que no serán controladas por las empresas. De momento algunos empresarios ya se están preparando para reducir plantilla porque no podrán soportar, si no lo hicieran, los incrementos de costes previstos con las nuevas leyes de control que nos quieren imponer. El resultado, una vez más, de las “políticas sociales” de Sánchez y compañía será el habitual: empresas ahogadas y más paro.
Queda claro que Melilla (y Ceuta) son piedras en el zapato de Pinocho Sánchez
Queda claro que Melilla (y Ceuta) son piedras en el zapato de Pinocho Sánchez. Cade vez se disimula menos la incomodidad que siente nuestro actual gobierno comunista en funciones con ambas Ciudades Autónomas (el tema de las bonificaciones a la seguridad social es sólo un paso más que sumar al tema de la frontera). Si fuese por él ya seríamos parte del Reino de Marruecos. Melilla y Ceuta molestan y, cuan si fuesen prescindibles, sería un alivio para Pinocho y sus varios socios de todo pelo que, por acción u omisión, se cedieran a nuestro incómodo vecino.
