La playa del Hipódromo luce desde ayer, y como desde hace ya varios veranos, su Bandera Azul, un galardón anual y sistema de certificación de calidad que se concede y que está impulsada por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac). El presidente Juan José Imbroda, que fue el encargado de izar la Bandera Azul, destacó la "cantidad de prestaciones" que tienen las playas de Melilla "en su conjunto", por lo que animó a los melillenses a disfrutar de ellas. El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, izó ayer por la mañana la Bandera Azul en la playa del Hipódromo. El jefe del Ejecutivo local, junto al consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig, explicó que la Bandera Azul ha sido concedida un año más por "cómo están las playas" de Melilla "en su conjunto", así como por la "cantidad de instalaciones" que tienen "para todo tipo de gustos y de personas". "Las playas están preciosas".
Imbroda hizo hincapié en la "explotación enorme" con la que cuentan las playas de la ciudad. Resaltó así que hay zonas de la playa con instalaciones deportivas, en las que se pueden jugar al vóley, al fútbol-playa y al tenis playa. Además, subrayó que existen dispositivos para que las personas con discapacidad puedan acceder a la playa sin problemas.
"Las prestaciones que hay en las playas de Melilla son magníficas", aseguró el presidente de la Ciudad. De ahí que, un año más, se haya conseguido la Bandera Azul, un galardón anual y sistema de certificación de calidad que se concede y que está impulsada por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac).
La primera autoridad melillense reconoció que es "muy difícil" conseguir uno de estos galardones, por lo que dejó claro que si las playas de Melilla lo consiguen es por el "trabajo año a año". Imbroda animó a los melillenses a disfrutar de las playas y avanzó que, en los próximos días, se volverá a izar otra Bandera Azul en la ciudad, pero esta vez en el Puerto Deportivo.
