El presidente de la Asociación de Estudios Melillenses ha hablado ante este periódico acerca de la situación que atraviesa la entidad debido a la pandemia, por la que muchas de sus actividades se han suspendido. Además, ha destacado que siguen trabajando en todo lo que engloba al patrimonio histórico y cultural de la ciudad de Melilla. Dedicados al estudio y divulgación de temas históricos y sociales, así como a la difusión de temas de índole artístico, didáctico, científico, antropológico y humano sobre todo de la ciudad de Melilla, la Asociación de Estudios Melillenses cumple su 40 aniversario este año. Fue creada por un grupo de apasionados por el Patrimonio de Melilla y su entorno el 25 de marzo de 1981.
Entre sus funciones se encuentra el mantenimiento de relaciones con organismos nacionales de igual o parecido carácter y con Centros de aspiraciones afines creados o por crear en la ciudad de Melilla; la independencia de cualquier grupo, partido o central de carácter político y la defensa del Patrimonio Histórico-Artístico de Melilla.
“El emblema o logo escogido recoge el escudo de Melilla situado en el centro de la Puerta de Santiago como símbolo de que su ámbito de acción se circunscribe a la ciudad de Melilla. Se nos cedió por parte del Ayuntamiento un bello edificio en Melilla la Vieja, la antigua Sala de Armas de los Almacenes de San Juan, edificación construida en el reinado de Carlos III , como indica el escudo de su fachada principal”, ha explicado Benito Gallardo, presidente de la Asociación.
También, ha añadido que en todas las salas hay expositores y paredes donde se exponen toda clase de objetos de la vida cotidiana, cuadros de personajes de la ciudad, placas, diplomas, planos…en su mayoría donados por personas de Melilla .
En los últimos años, esta ha fortalecido las relaciones institucionales, destacando entre otros, a nivel nacional el Ministerio de Cultura, el Ministerio de Defensa, la Universidad de Granada, la Universidad Nacional a Distancia así como otras instituciones locales
Enclavada en este lugar único y de gran carga histórica como es Melilla la Vieja, en el antiguo Almacén de Pólvora del siglo XVIII, constituyendo el propio espacio (todo el frente de Tierra) una verdadera joya arquitectónica. “La preservación de dicho lugar es una de nuestras prioridades, esforzándonos continuamente para acondicionarlo y trabajando día a día por un óptimo entorno para nuestros usuarios y los tesoros que en este lugar preservamos”, ha indicado.
En el museo de la Asociación de Estudios Melillenses se conservan a día de hoy dos mil seiscientos cuatro ( 2.604) objetos procedentes de donaciones ( algunos cedidos por el propio Museo de la ciudad ) , estando incluido en el directorio de Colecciones y Museos del Ministerio de Cultura de España, por ello se llevan a cabo ambiciosos planes de inventariado, documentación e investigación de estos bienes. Por ello si cualquier ciudadano posee algún objeto relacionado con el patrimonio de la ciudad, éste es un buen lugar para custodiar estos bienes para las generaciones venideras (recuerdos personales, condecoraciones, fotografías, postales, libros, armas, uniformes, toda clase de utensilios u objetos del hogar).
Su presidente también ha querido destacar las importantes colecciones bibliográficas, documentales y hemerográficas custodiadas en nuestra sede a disposición de cualquier ciudadano. “La Asociación puede ser visitada de forma permanente cualquier día por el público en general, así como en visitas de grupos”, ha informado Joan Casares.
Uno de los máximos órganos de difusión es la Revista Trápana, resucitada por la actual Junta Directiva tras veinte años desaparecida. “Ya son seis los números publicados, cada número recoge habitualmente una decena de artículos de temas muy variados como es historia, museología, arqueología, medicina, habitualmente ahonda además en la biografía de ilustres personajes de la ciudad”, ha expresado su presidente.
En cuanto a la temática, aunque muy amplia, tiene en común un factor decisivo y es la propia Melilla, ya que solo por sus índices podemos intuir este hecho pues prácticamente en todos los artículos aparece la palabra Melilla. Por tanto una revista de Melilla hecha por Melillenses que irradiará conocimiento a un sinfín de lugares pues se difunde por los centros de investigación más importantes de España.
Anualmente, se desarrollan Premios de investigación que llevan el nombre de uno de los fundadores, Francisco Saro Gandarillas, en los cuales se dota económicamente a los ganadores. Otro concurso no menos importante que organizamos es a la mejor/es fotografía/ as , concurso con temática siempre relacionada con el patrimonio melillense.
Además, ha querido señalar la realización de los Itinerarios Culturales en la propia ciudad y en Marruecos ( Salidas – Excursiones), conociendo su historia, patrimonio, gastronomía generalmente con una periodicidad bimestral, con salida a las 07.30 horas y vuelta a las 20:00 horas, buscando puntos de encuentro entre ambos países.
La pandemia y las medidas establecidas han paralizado todas sus actividades por completo. Lo único que siguen realizando aunque en menor medidas son las Conferencias en “streaming” a través del canal you.tube de la AEM. También ha expresado que la difusión de sus actividades y comunicados se realiza a través de correo electrónico a los socios y simpatizantes, quienes informan a familiares y allegados. Además, lo anuncian en el Facebook de la AEM, sobre todo las conferencias y eventos desarrollados en la sede.
“En la actualidad contamos solamente con voluntarios que trabajan por la Asociación sin ninguna remuneración, por ello cualquier colaborador con nosotros tiene la puerta abierta. En el futuro, de obtener mayor financiación por parte de la Administración Local, la contratación de personal permitiría abrir de forma permanente nuestra sede, beneficiando a toda la ciudadanía”, ha indicado.
Actualmente la Asociación se nutre por la cuota anual de los socios y en especial por el Convenio de colaboración anual de la Consejería de Cultura (subvención de la cual el 50% es para sufragar la revista Trápana editada por una empresa melillense y el resto prácticamente para manteamiento y seguridad ).
Por ello, el papel que juega el socio es indispensable para hacer crecer este lugar. Los pasos para ser socio son sencillos, mediante la inscripción de una ficha y dos autorizaciones bancarias, pagando una cuota anual, que en la actualidad es de 30 euros, teniendo en cuenta que son una asociación sin ánimo de lucro.
“Este año hemos cumplido nuestro 40 Aniversario. Tenemos grandes retos en los años venideros y todos ellos pasan por recuperar el papel por la que surgió nuestra entidad y no es otra que la defensa del Patrimonio histórico melillense. Somos conscientes que nuestra asociación ha sobrevivido durante décadas con las cuotas de los socios exclusivamente pero no cabe duda que los apoyos económicos de la Ciudad Autónoma han permitido desarrollar nuevas actividades, impensables años atrás. De cara al futuro, necesitamos seguir creciendo. Una evolución necesaria que se manifiesta en el propio espacio de la Sede que desde hace algún tiempo no nos permite más lugares para libros, documentación histórica o bienes culturales. El aforo de 50 personas en las conferencias se ha quedado pequeño y en ocasiones los asistentes deben estar de pie o sentados en la escalera”.
Para el 22 de abril, tienen previsto la presentación de los 3 volúmenes de “ El embrujo del Rif”, en colaboración con UNESCO-Melilla y la participación del autor D. Carlos Antón en la sede de la Asociación , a las 18.00 horas y sin publico ,retransmitida streaming debido a lla pandemia.
