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La desaladora dejará de suministrar agua del 22 al 24 de agosto por obras de ampliación en la misma

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La Ciudad Autónoma ha enviado una carta de queja a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y a la Delegación del Gobierno por no haber avisado con suficiente antelación de la «parada completa» de la planta

 

La Planta Desalinizadora de Melilla dejará de suministrar agua a la ciudad desde las 08:00h del próximo martes 22 de agosto hasta las 00:00h del viernes 25 debido a que se va a realizar una «parada completa» en dicha planta para acometer los trabajos de ampliación en la misma, que consisten en la conexión de la pieza de unión del inmisario existente con el nuevo, el comienzo de la limpieza y reparación del actual inmisario, y la conexión del colector de salmuera al colector del lavado de filtros.

Esta parada programada de la desaladora ha pillado por sorpresa al Gobierno de la Ciudad Autónoma, que ha enviado tanto a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) como a la Delegación del Gobierno una carta de queja a ambas administraciones por no haber avisado con la suficiente antelación de dicha parada -recibieron la notificación el pasado viernes día 11-, ya que, tal y como ha asegurado en rueda de prensa el consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Manuel Ángel Quevedo, «esto se sabía desde hace muchos meses antes, al menos desde mayo, que iba a suceder», ya que explica que para acometer dichas obras tienen que contratar un barco y una pontona.

De hecho, asegura que la CHG solicitó en mayo a la Autoridad Portuaria que dicho buque estuviera atracado en el puerto de la ciudad durante seis semanas. «Si se pide en el mes de mayo es que ya sabían que en estas fechas vendría un barco que ya tenían contratado desde hace mucho. Con lo cual, no entendemos que no hubiera una previa comunicación», lamenta.

Cortes en las duchas de las playas

Quevedo explica que han intentado renegociar las fechas de la parada de la desaladora con la CHG al ser «malísimas» para la ciudad en esta época del año, ya que avisa que dicha parada va a provocar que se corte el agua de las duchas de las playas «durante unos ciertos días y horas». Además, les va a resultar «imposible recuperar en tan pocos días los niveles máximos de los depósitos» antes del inicio de la Feria de Melilla, que será el 2 de septiembre. «No vamos a tener muy probablemente agua suficiente para esto porque nos han avisado con muy poca antelación», avisa.

Por ello, la Ciudad no ve «mínima razonable» que la CHG comunique la parada de la planta desalinizadora «con tan poco margen de maniobra para los Servicios Potables de la Ciudad«, «sin plantear una fecha de consenso y sin trasladar tampoco a la Ciudad Autónoma, por quien ha tomado unilateralmente dicha iniciativa, la responsabilidad de su comunicación a la ciudadanía».

Por eso, el Gobierno local exige al organismo público que se utilicen «todas las medidas posibles para minimizar las graves consecuencias de dicha parada sobre la población en fechas tan importantes», que en futuras ocasiones se comuniquen dichas restricciones «con suficiente antelación y se planteen reuniones de coordinación con la Ciudad Autónoma para que se acuerden con tiempo necesario las actuaciones que tengan efectos de parecida importancia sobre el consumo de agua potable de la población».

Por último, piden que la CHG y/o la Delegación del Gobierno, como administración responsable de las obras en el primer caso y como representante en Melilla del Gobierno de la Nación del que depende la CHG, en el segundo caso, informen a la población de las causas y los plazos de la paralización del suministro de agua de la desaladora en vez de la Ciudad Autónoma.

Restricciones

Con el fin de mitigar las consecuencias que puede acarrear dicha parada, Quevedo explica que desde el viernes están restringiendo el suministro de agua «una hora antes», desde las 23:00h, para poder llegar al próximo martes 22 con los depósitos de agua «lo más llenos posibles». Asimismo, informa que los tres días en los que la desaladora estará parada restringirán el suministro sobre las 15:00h y lo reabrirán a las 05:00h con el objeto de que desde esta última hora hasta las 15:00h se puedan abastecer todas las viviendas, comercios, etc. y dispongan de un «consumo normal». En este sentido, ha apelado a la población a que en esos días «se minimice el consumo de agua todo lo posible«.

Una vez superados esos tres días, desde el día 25 hasta el inicio de la feria, el 2 de septiembre, el popular explica que «volveríamos a la situación normal» intentando recuperar «todo lo posible» en los depósitos, restringiendo el agua de 00:00h-05:00h o, si los depósitos no recuperan sus niveles máximos de agua, a partir de las 23:00h.

En la feria, los cortes se producirán desde las 02:00h-06:00h y, cuando ésta termine, «volveríamos a la situación normal» con restricciones de 00:00h-05:00h.

Quevedo pide que la CHG ceda la gestión de sus instalaciones a la Ciudad Autónoma

A preguntas de los periodistas, Quevedo cree que la coordinación y la comunicación de la CHG debería de ser «mucho mayor» y «más constante» en este aspecto. Aun así, apuesta porque todas las instalaciones que dependen de dicho organismo público pasen «cuanto antes» a ser titularidad de la Ciudad Autónoma, como el Pantano de las Adelfas o la Planta Desalinizadora.

«Con todos los problemas que tiene ahora la CHG, yo comprendo que lo de Melilla les viene un poco lejos», afirma, dejando claro que la Ciudad cuenta con profesionales y material necesario para «ser mucho más eficaces» en esta cuestión. Por lo tanto, concluye que «ese centralismo» de que sea la CHG la que tenga las competencias de la desaladora y de otras instalaciones «no es un sistema bueno ni para ellos ni para nosotros», asegurando que seguirán solicitando el traspaso de dichas instalaciones.

Prevé la puesta en marcha del cuarto módulo para 2025

A preguntas de los periodistas, el titular de Medio Ambiente y Naturaleza prevé para el primer trimestre de 2024 la finalización de las obras del cuarto módulo de la desaladora. No obstante, cree que la puesta en funcionamiento de dicho módulo no será posible hasta 2025, ya que tiene que estar operativa la línea eléctrica que administre la electricidad suficiente a la desaladora para generar en torno a 32.000 metros cúbicos diarios de agua, en vez de los 18.000 actuales; así como la instalación de las nuevas redes de agua con «automatización» para comprobar si  se producen «pérdidas».

«En 2025, cuando tengamos todo eso, es muy probable que no haya que hacer ningún estrangulamiento de la red, haya agua las 24 horas del día y todo marche en condiciones», pronostica.

 

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Miguel Rivas

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