Según expusieron ayer tanto la nueva consejera de Hacienda, Esther Donoso; como el consejero de Educación, Juventud y Deportes, Antonio Miranda, el interventor general de la Ciudad, Pedro Márquez, presentará su “renuncia voluntaria” en los próximos días, aunque no se han alegado los motivos que le habrían llevado a tomar esa decisión. No obstante, según puso saber este diario la semana pasada, era la propia Ciudad Autónoma de Melilla la que pretendía al funcionario, entre otras razones, por extralimitarse de sus funciones y querer mandar más que el Gobierno y sus consejeros, según apuntaron fuentes cercanas al caso. Cabe recordar que la Ciudad ya anunció que se crearía el puesto de viceinterventor para zanjar los conflictos de coberturas de la plaza de interventor. Según expuso la nueva responsable de la Consejería de Hacienda, Esther Donoso, el interventor de la Ciudad “presentará su renuncia voluntaria en estos días”. Por otro lado, el consejero de Educación, Juventud y Deportes, Antonio Miranda, también anunció ayer en rueda de prensa la intención del interventor general accidental de la Ciudad, Pedro Márquez, de dimitir. Eso sí, lo hizo asegurando que desconocía los motivos que le habían llevado a adoptar esa decisión.
A pesar de la versión oficial, fuentes consistentes confirmaron la semana pasada a MELILLA HOY que el gobierno local tenía planeado cesar al interventor general accidental del Grupo A1, licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales. De hecho, apuntaban a que pretendían cesarlo durante la jornada de ayer.
Entre las razones facilitadas a este diario, está la paralización a la que el funcionario estaría sometiendo presuntamente a la gestión de la Ciudad Autónoma. Las mismas fuentes llegaron a asegurar que el interventor habría querido mandar más que el Gobierno y sus consejeros, extra limitándose de sus funciones.
Por otro lado, la Ciudad Autónoma ya anunció que se crearía una plaza de viceinterventor para tratar de zanjar los conflictos de cobertura derivados del puesto de interventor, que ya ha quedado vacante en las tres ocasiones que ha salido a concurso, siendo cubierta de forma accidental por varios funcionarios municipales en los últimos cuatro años.
