Fue la acusación particular quien solicitó la pena para el acusado, al que señaló de cometer hasta cinco delitos al hacerse pasar presuntamente por el padre de un menor para que éste obtuviera la nacionalidad. La Fiscalía entendió que no hubo delito de falsedad documental. En esta ocasión, la Fiscalía no pedía ninguna pena, sino la absolución para el individuo imputado por un delito de falsedad documental. Fue la acusación particular quien reclamó más de cinco años de prisión para el hombre, al que señaló que habría cometido hasta cinco delitos diferentes al hacerse pasar presuntamente por el padre de un niño, según expuso, para que el menor obtuviera la nacionalidad española.
Anteriormente, el acusado se sometió a una prueba de paternidad en la que se demostró que no era el padre del menor. De hecho, la acusación afirmó que en realidad se trata de la pareja de la abuela, y no de la madre del niño. Según resaltó uno de los testigos, un agente de la Policía Nacional, existían diferentes indicios que apuntaban a que el niño no vivía en la casa del acusado, sino en Marruecos, “con su verdadero padre y madre”. No obstante, admitió que en el documento del menor no existía falsedad documental, puesto que no estaba manipulado.
En esta línea, la Fiscalía coincidió con la defensa en que no existían pruebas periciales que evidenciaran que el acusado había cometido un delito de falsedad documental ni hubiera actuado con la intención de cometer una estafa. El juez decidirá.
