El segundo técnico del Melilla Baloncesto analiza esta semana, en la habitual sección ‘La Pizarra’, al último rival en esta primera vuelta del conjunto melillense, el Quesos Cerrato. El ayudante azulón destacó el gran bloque y la potencia física del equipo palentino, que se suma al peligro de todos sus exteriores. El Melilla Baloncesto afronta mañana miércoles el último partido de la primera vuelta, y lo hace visitando la cancha del Quesos Cerrato Palencia, el que es, sin duda y en opinión de Javi Muñoz, “el mejor conjunto de esta primera fase del campeonato”.
Para el segundo técnico del decano, el rival dispone de “un equipo muy sólido. Físicamente, se trata de una escuadra muy dura, con jugadores bastante grandes y que se ha sobrepuesto sin ningún problema a la salida del que era su técnico, Porfirio Fisac”, resaltó.
Analizando más profundamente al líder, incidió en que “en defensa su potencial físico interior es lo que le da esa solidez defensiva y esa capacidad de poder jugar rápido, gracias al control del rebote y a la defensa del bloqueo directo”. En cuanto al nivel ofensivo, el ayudante de Alejandro Alcoba considera que los castellano-leoneses cuentan “con jugadores con muchos puntos en sus manos, ya que la gran mayoría conocen perfectamente la competición y saben controlar cualquier situación del juego”.
A continuación, Javi Muñoz se centró más exhaustivamente en los componentes de la plantilla del Quesos Cerrato. Así, aseguró que sus bases, Dani Pérez y Dani Rodríguez, son “el principal motor del equipo, puesto que juegan muy bien a campo abierto, con puntos en sus manos y capaces de tirar o buscar buenas penetraciones siempre tras bloqueo directo”. De todos modos, la principal virtud de ellos es que “son capaces de llevar el tempo de partido en todo momento, especialmente en los instantes complicados”, apuntó.
Ya en el exterior, el segundo de a bordo se refirió a Marc Blanch y a Joan Tomàs, quienes, según Javi Muñoz, están “rindiendo a un nivel espectacular y son dos de los jugadores más importantes en la LEB Oro”. También destacó a McCarron, que “se está adaptando muy bien a la liga y, poco a poco, está teniendo más protagonismo en el juego palentino”, así como a Romà Bas, “un jugador que también ayuda mucho al equipo”. En definitiva, cree que es “una línea con muchos puntos, pudiendo cualquiera de ellos tener un buen día y complicarte el encuentro”.
Muñoz concluyó su análisis pormenorizado del plantel palentino con los jugadores que desarrollan su juego en la ‘pintura’. Ahí sobresale “el buque insignia del equipo morado, Lamont Barnes, un jugador con mucho oficio, muy grande y que tiene muy claro su rol. Le acompañan Fakuade, que el año pasado fue una de las revelaciones de la categoría y que esta temporada, además de su gran físico, ha añadido un mayor rango de tiro, y Urko Otegui, una institución en la LEB Oro”, afirmó el segundo técnico del decano.
Cabe recordar que el choque entre el Quesos Cerrato y el Melilla Baloncesto se disputará mañana miércoles, desde las 21’00 horas, en el Pabellón Marta Domínguez, un duelo en el que se miden los finalistas de la Copa Princesa.
