Izquierda Unida (IU) asegura que tiene como objetivo inmediato "salvar a las personas" y presenta un plan de emergencia social cuyo eje fundamental es la creación de empleo. La formación aboga por la puesta en marcha de diez medidas entre las que se encuentran el trabajo y la renta garantizados. La formación apuesta por la revalorización de las pensiones mínimas, el aumento del salario mínimo y un plan de empleo y formación de parados de larga duración y plan de empleo juvenil.
Además, entre las propuestas de IU se encuentran el suministro vital básico de energía y agua, así como la creación del Abono de Transporte Social.
Entre las medidas de este plan de emergencia social, también se encuentran la paralización de desahucios y la creación de un parque público de viviendas y un "Banco Bueno". También apuesta la formación por combatir la violencia sexista, que la escolarización de 0 a 3 años sea pública y dotar de ayudas a la pequeña y mediana empresa y autónomos.
A este plan, IU aporta una serie de medidas de financiación como el impuesto extraordinario sobre el incremento patrimonial, la reforma del Impuesto de Sociedades, la equiparación de la tributación de las rentas de capital a las del trabajo o un impuesto sobre la riqueza, entre otras.
Según la formación, es necesaria una reforma fiscal "justa" y la "voluntad política necesaria" para luchar "contra el fraude y la economía sumergida".
