Hace aproximadamente 15 años que comenzaron los Planes de Empleo con Apoyo para personas con discapacidad intelectual. En estos 15 años han habido más de 300 oportunidades para que hombres y mujeres con discapacidad pudieran trabajar como otros ciudadanos, sentirse activos, productivos, contribuyentes, cotizantes, etc…
Lo que en su día era algo extraordinario hoy es un derecho, las últimas normativas de empleo público establecen que el 2% de todas las plazas deben de estar reservadas para personas con discapacidad intelectual.
Gracias a experiencias como los Planes de Empleo con apoyo, se está logrando la incorporación a la empresa ordinaria de personas con discapacidad intelectual. Por otra parte la Ciudad Autónoma de Melilla fue de las primeras administraciones que convocó plaza de funcionario para personas con discapacidad intelectual. La administración general del estado en su oferta anual oferta también plazas para este colectivo.
Sería irracional y muy probablemente ilegal que desapareciera el Plan de Empleo con Apoyo para personas con discapacidad intelectual, en nuestra ciudad que carece de tejido industrial o del sector primario y donde la administración es la principal creadora de empleo. La Consejería competente en los Planes de Empleo no puede llevar a cabo esta injusticia. No es lícito jugar con los derechos e ilusiones de las personas con discapacidad intelectual y de sus familias. Para ellos 6 meses de trabajo es algo más que un sueldo, es sentirse parte activa, ver la autosuperación y sentir la inclusión.
En estos días que tanto CERMI como de Plena Inclusión están luchando por el derecho al voto de las personas a las que se le ha arrebatado este derecho, pues aquí en Melilla vamos a tener que luchar por el empleo que suponía el Plan de Empleo con Apoyo.
Perder cuando se tiene tan poco no es admisible.
