Los menores, que estaban ocultos en camiones de feriantes para poder pasar a la península, fueron localizados por los agentes policiales tanto en la zona del recinto ferial, ubicada en la Plaza San Lorenzo, como en el puerto
La primera jornada de la Operación Feriante que se ha desarrollado este lunes ha finalizado con la localización de un total de 11 menores extranjeros no acompañados que intentaban acceder a manera irregular a la península ocultos en los vehículos de los feriantes.
Según han comentado fuentes de la Policía Nacional, las localizaciones de dichos menores se han producido tanto en la zona del recinto ferial, ubicado en la Plaza Multifuncional de San Lorenzo, como en el puerto.
“La finalidad fundamental es velar por la seguridad de aquellas personas que, aprovechando la coyuntura de las tracciones intentan meterse dentro del barco, y para evitar que sufran daños, porque se arriesgan mucho la vida, pues intentamos localizarlos”, ha explicado ante los medios el teniente Francisco Javier Navas, responsable jefe de la sección Fiscal y Fronteras del Puerto de Melilla, quien agrega que en dicho dispositivo también confiscan aquellas “sustancias que puedan estar prohibidas”.
A preguntas de los periodistas, el teniente Navas admite que, en los dos años que lleva en el puesto, el número de polizones que intentaban acceder a la península escondidos en las atracciones de feria “no fue tan significativo”. “Anteriormente si me consta que habían muchas más personas con esa intención de llegar al barco. Este año supongo que las cosas se estarán haciendo bien”, valora.
En la Operación Feriante, que concluye este miércoles 11 de septiembre, participan la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), el Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), drones de la Policía Nacional de Melilla, guías caninos y helicópteros, con apoyo desde la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.
Día a día agentes de Fiscal y Fronteras
A preguntas de los periodistas, el teniente Navas ha explicado que el día a día de la Guardia Civil en la sección Fiscal y de Fronteras es el de “control e inspección de vehículos, mercancías” y evitar que menores migrantes accedan a los barcos ocultos en vehículos.
Admite que trabajar durante la OPE es “bastante duro” por las “condiciones climatológicas” y destaca operaciones importantes de recuperación de vehículos de alta gama o de personas detenidas por tráfico de drogas.