El presidente de la Asamblea, Juan José Imbroda, se comprometió ayer públicamente a no convocar más plenos de carácter urgente en esta legislatura si no es con el consenso de todos los grupos políticos que conforman la Cámara melillense. Imbroda arrancó la sesión plenaria con este compromiso público “en aras de buena voluntad”, a pesar de que “el reglamento es clarísimo en cuanto a que la Mesa de la Asamblea es la que convoca los plenos y el presidente firma después la convocatoria”. De esta forma, Imbroda apuntó que no quiere que se vuelvan a repetir “debates innecesarios” respecto a la urgencia de los plenos, como el que se celebró el jueves día 17 a las 19.30 horas, que se desarrolló en medio de una gran tensión y en el que la oposición se negó a votar como protesta. Al término del pleno, Coalición por Melilla (CPM) consideró “coherente” la postura del presidente Imbroda. A preguntas de los periodistas, la vicepresidenta segunda de la Ciudad Autónoma y diputada de CPM, Dunia Almansouri, apuntó que este cambio de postura por parte de Imbroda en apenas una semana se podría deber a que “le habrán asesorado legalmente y le habrán dicho que realmente no tenía razón”.
Almansouri insistió en que CPM y el resto de grupos de la oposición no sólo tienen argumentos suficientes para impugnar el pleno extraordinario y urgente celebrado el jueves de la semana pasada, sino que además en él “se cometieron una serie de vulneraciones de derechos hacia los diputados que pueden terminar mal”.
“De ahí el cambio de actitud y que alguien le haya recomendado al presidente que modifique esa forma de actuar porque realmente no es ajustada a Derecho”, añadió la diputada de CPM, partido cuyos abogados están estudiando si siguen adelante con su decisión de impugnar el pleno de la semana pasada.
En este punto, recordó que los partidos de la oposición solicitaron una Junta de Portavoces antes de que se celebrara el pleno por entender que no se ajustaba a los casos en que se puede convocar de forma extraordinaria y urgente porque ninguno de los dos puntos incluidos en el orden del día requerían dicha urgencia.
“Se podría haber convocado para unos días después y no habría habido ningún problema ni se hubiera montado la que se montó en el pleno”, manifestó Almansouri.
En cualquier caso, dijo que a CPM le alegra esta nueva postura del presidente y de que “haya sido capaz de reconocer en el pleno su error”, así como su predisposición de ahora en delante de “hacerlo de otra manera” diferente a la de la semana pasada, cuando su Gobierno “se enrocó en una posición sin sentido”.
Acta
Por otro lado, al inicio de la sesión plenaria, CPM hizo constar su disconformidad con el acta de la sesión plenaria del pasado jueves, ya que en ella no se recogía la petición de palabra que hizo su presidente, Mustafa Aberchán, tras ser declarada la urgencia del pleno, ni tampoco una de las observancias al reglamento que hizo. El acta quedó sobre la mesa para su revisión.
