El próximo sábado, coincidiendo con el 30 aniversario del ascenso del C.D. Gimnasio Iglesias a Liga Nacional de Juveniles, jugadores, directivos, técnicos y auxiliares rendirán un más que merecido homenaje al que fue su presidente y fundador del club, Juan Antonio Iglesias.
Nacido en Melilla el 15-12-1953, casado con Ana, y padre de Daniel, Javier y Ana Belén. Fue el fundador del Gimnasio Iglesias, principal referente del karate en la Ciudad, desde el año 1985 posee el cinturón negro 5º Dan, además de ser Juez del Tribunal Nacional de Grados y Entrenador Nacional.
Sus inicios como futbolista fueron en el Jordana, aunque su pasión por el deporte y su inquietud de gestión y organización, siendo aún un adolescente, le llevaron a organizar el primer campeonato Alevín de fútbol en Melilla (no existía esa categoría federada en ese momento) en el antiguo campo de fútbol de La Hípica.
Su otra gran pasión fue el kárate, lo que le sirvió para ser reconocido a nivel nacional, marcando una época en las artes marciales en nuestra ciudad. Comenzó dando clases en el Gimnasio Kimura, y el 5 de agosto de 1985 inauguró el Gimnasio Iglesias, en la Calle Carlos V. Fue allí, tras una cena en la Navidad del año 1986, junto a Diego Muñoz, donde se gestó la creación del primer equipo de fútbol, que llevaría el nombre de C.D. Gimnasio Iglesias hasta que años después se cambió al actual, C.D. Gimnástico Melilla.
La historia de la creación es muy curiosa, puesto que su hijo Javi -que ha sacado la inquietud organizativa de su padre, ya que es el actual presidente de la Federación Melillense de Ciclismo- se quedó fuera del equipo de la A.V. Progreso en el torneo de Navidad de 1986 de asociaciones de vecinos que se disputaba en el Pabellón Lázaro Fernández. Entonces, y tras ver la tristeza de su hijo, le prometió hacer un equipo de fútbol, y Diego Muñoz, que estaba sentado junto a él, sería el entrenador.
Diez meses después, el C.D. Gimnasio Iglesias disputó su primer partido oficial en categoría Infantil en el Campo de El Tesorillo, con una plantilla formada en gran parte por karatekas, y que contaba con jugadores que posteriormente fueron importantes para el club, como su hijo Dani, Carlos Tejumal, Povedano o Farid, entre otros.
Un par de años bastaron para que el club fuese creciendo, llegando a contar de forma progresiva con equipos en todas las categorías oficiales, e incluso una sección de baloncesto.
Llegó a contar con más de 200 jugadores, consiguiendo varios ascensos a Liga Nacional de Juveniles, y a Tercera División. Además tvo entre sus filas a varios jugadores preseleccionados para la selección española de sus respectivas categorías.
El homenaje este sábado consistirá en partidos de fútbol 7 entre jugadores que hace 30 años consiguieron el ascenso, y aquellos que en los años posteriores formaron parte de la plantilla.
Los encuentros se celebrarán en El Tesorillo, a partir de las 10’00 horas, sirviendo también de aliciente para los jugadores, de forma que sus hijos los puedan ver jugar al fútbol y escuchar anécdotas e historias de aquella época.
Posteriormente, en el Hotel Melilla Puerto tendrá lugar una comida junto a familiares, y allí se entregará una camiseta y un detalle conmemorativo de ese hito histórico.
Todos los que formaron parte de esa gran familia, “queremos brindarle este homenaje al hombre que hizo que algunos de nosotros cumpliéramos nuestro sueño. Gracias presidente, gracias Juan Antonio Iglesias”.
