Abdelmalik Tahar había sido contratado por un militante del PP para reunir el periodo mínimo de trabajo y cobrar el desempleo. Ese detalle merecía la condena de Enrique Palacios, presidente de la Ciudad, que denunciaba que era un episodio de recompra de la voluntad de Tahar, cuyo fin sería el cambio de las declaraciones judiciales que realizó en las que inculpaba a Ignacio Velázquez, ex presidente de la Ciudad, en un presunto delito de cohecho.
Nuevo Futuro invertía en Melilla 30 millones de pesetas para la atención de niños desprotegidos. Se hablaba de firmar un posible convenio con la Ciudad Autónoma. Abdelmalik Tahar había sido contratado por un militante del PP para reunir el periodo mínimo de trabajo y cobrar el desempleo. Ese detalle merecía la condena de Enrique Palacios, presidente de la Ciudad, que denunciaba que era un episodio de recompra de la voluntad de Tahar, cuyo fin sería el cambio de las declaraciones judiciales que realizó en las que inculpaba a Ignacio Velázquez, ex presidente de la Ciudad, en un presunto delito de cohecho.
Nuevo Futuro invertía en Melilla 30 millones de pesetas para la atención de niños desprotegidos. Se hablaba de firmar un posible convenio con la Ciudad Autónoma.