El deseo de alcanzar el consenso en torno al candidato alternativo a Aberchan como presidente de la Ciudad Autónoma, la inmediata dimisión del mismo y consiguiente disolución del gobierno, la invitación a CPM para participar en el nuevo órgano ejecutivo y la articulación de un programa conjunto para la gestión de los intereses generales de Melilla, eran los cuatro puntos esenciales de la propuesta que los tres partidos de la oposición, junto al grupo mixto, hacían llegar a Mustafa Aberchan, que en declaraciones a este diario calificaba de "preocupante" la propuesta.
El GIL se querellaba contra PP y UPM por un presunto delito de cohecho, y es que acusaba a los populares de haber intentado comprar la voluntad de todos sus diputados locales.