La sesión de constitución de la nueva Asamblea de Melilla y nombramiento del presidente no pudo resultar más sorpresiva. La negativa final del PSOE a seguir las directrices de su ejecutiva federal, que le imponía un pacto con el PP, UPM y PIM para cerrar cualquier posibilidad de participación del GIL en el gobierno local y que bendecía el nombramiento de Juan José Imbroda como presidente, resultó crucial para que finalmente el líder y cabeza de lista de CPM, Mustafa Aberchán, fuera nombrado presidente de Melilla. La sorpresa se desvelaba nada más iniciarse las votaciones de candidatos. CPM entraba al Gobierno de la Ciudad de la mano del PSOE y el GIL. Las reacciones no se hicieron esperar y el PSOE nacional hablaba de expulsar a sus dos diputados en la Asamblea de Melilla por no respetar el pacto.