En plena jornada de reflexión se conocía que como consecuencia de las denuncias que el Partido Social Demócrata (PSDM) había presentado ante el Juzgado de Guardia, eran detenidas cuatro personas como posibles responsables de los hechos ocurridos en la Cañada, cuando los candidatos de PSDM fueron bombardeados con piedras por unos 300 jóvenes de la zona. Estas cuatro personas eran detenidas por presuntos desórdenes públicos, lesiones y daños.
El GIL agradecía el apoyo de los melillenses y su candidato, Cris Lozano, sufría un extraño robo de documentos y fotografías en su vivienda de Madrid.
El PSOE no quería hablar de pactos hasta después de las elecciones y la UPM pedía mayor seguridad a la Delegación del Gobierno.