“Más pronto que tarde, el pueblo con arraigo perderá el miedo inoculado y podrá hacer valer con auténtica libertad, de forma democrática, su aplastante y arrolladora mayoría”, dice el diputado cepemista
El diputado local de Coalición por Melilla (CPM) Emilio Guerra cree que su partido “no tiene la representación real que merece en la Asamblea “por su potencial electorado”. No obstante, está convencido de que “más pronto que tarde, a pesar de jugar un partido en clara desventaja, donde las reglas se cambian a interés de una parte, el pueblo con arraigo perderá el miedo inoculado y podrá hacer valer con auténtica libertad, de forma democrática, su aplastante y arrolladora mayoría”.
Por ello, en una nota de prensa, Guerra ha instado a “seguir soñando” a “quienes sueñan todas las noches con nuestra desaparición para pillar algo del botín”.
Y es que, según Guerra, “CPM es el partido a batir, a eliminar del escenario sociopolítico de Melilla, porque es la única fuerza política con verdadero potencial de crecimiento debido a la demografía y al arraigo de sus gentes a esta tierra, y eso hace entrar en pánico al establishment”.
Guerra ve necesario “un movimiento unitario, progresista y renovado que ponga freno a los extremismos y a la peligrosa polarización nacional que sufrimos”.
Situación nacional
El diputado cepemista ha reconocido su “preocupación” por la “deriva” de la situación política nacional, que “para nada nos favorece”. “Dependemos mucho de las políticas del Estado, del gobierno de la Nación. Por tanto, la inestabilidad en Madrid deja muy lejos que se vayan a preocupar ahora por nuestros problemas”, ha argumentado.
Por ello, cree que para salir adelante en Melilla “o lo hacemos con políticas progresistas enfocadas al futuro de nuestra tierra y sus gentes, o no habrá porvenir para quienes hayan elegido envejecer y vivir indefinidamente aquí”.
Guerra entiende que España está pagando las consecuencias de una “lamentable e injusta Ley Electoral” que ha dado lugar a una “exagerada sobrerrepresentación de nacionalistas e independentistas”, pero ha señalado como culpables a PP y PSOE porque “nunca quisieron remediarlo modificando la Ley”. “Los únicos responsables son ellos por sus avaricias de poder. No son los malvados demonios, como trata de difundir la propaganda entre la opinión pública”, ha subrayado.
Sobre la Ley de Amnistía, Guerra opina que no existe impedimento constitucional para su desarrollo, pero “buena parte de su contenido, así como el posible proceso de tramitación, tiene inconvenientes y justificación legal suficiente para que sea rechazada, si no es aquí, puede que sea en Europa”.
