La secretaria general del PSOE pide que “no demos alas a aquellos que fomentan el frentismo, la división y el odio”, tanto en nuestra ciudad como en el conjunto del país
La secretaria general del PSOE, Gloria Rojas, ha advertido contra quienes se empeñan en enfrentar a las comunidades de cara a las elecciones del próximo 28 de mayo. “Lo que nos jugamos es mucho más que el color político del próximo gobierno de la ciudad, lo que nos jugamos es el propio futuro de Melilla” ha avisado. Por ello, la vicepresidenta de la Ciudad ha pedido que “no demos alas a aquellos que fomentan el frentismo, la división y el odio”, tanto en nuestra ciudad como en el conjunto del país, aunque no especifica a qué organizaciones políticas estarían actuando de este modo.
Gloria Rojas ha afirmado que algunas formaciones, nacionales y locales, se empeñan en enfrentar a las comunidades de esta ciudad. “Puede que, electoralmente, les funcione pero el precio a pagar, romper la convivencia de Melilla, traerá terribles consecuencias” ha avisado.
La vicepresidenta de Melilla, tras recordar que la Constitución Española recoge todos los españoles somos iguales ante la ley, sin distinción etnia ni religión, ha señalado que “tenemos que decir con orgullo que Melilla ha sido y es un ejemplo de armonía, de convivencia, de entendimiento”.
Melilla, crisol de culturas
En este sentido, ha indicado que “Melilla, siendo como es una ciudad crisol de culturas y contando con una riquísima historia fenicia, romana, omeya… es un lugar único en el mundo. Y lo es, precisamente porque esa multiculturalidad tiene su base en la convivencia pacífica y armónica de todos los que formamos parte de ella”.
Al respecto, ha destacado “que haya una convivencia sana, que todos seamos iguales en derechos y obligaciones, que la concordia sea la condición imperante en el día a día es importantísimo en cualquier parte del territorio nacional, pero lo es aún más en nuestra querida Melilla”.
Rojas ha asegurado que los socialistas tienen muy claro que hay cuestiones con las que ni se puede ni se debe hacer política. “Cuestiones de Estado y de Ciudad, como la lucha contra la violencia de género o la lucha antiterrorista, pero para mí igual de vital es también la convivencia”.
Llegados a este punto, ha puesto en valor la aprobación por parte del Gobierno socialista de la ley de Igualdad de Trato y no Discriminación, que “ha permitido prevenir y luchar de mejor manera y con nuevos instrumentos fenómenos como el racismo, la xenofobia, o la homofobia, al tiempo que ha servido para proteger de manera más efectiva a las víctimas en todos los ámbitos de la sociedad: educativo, sanitario, cultural…”
Además, ha aseverado que el Ministerio de Interior ha hecho de la lucha contra los delitos de odio una de sus prioridades, “con la implementación de los Planes de acción de lucha contra esta lacra, que atenta contra toda la sociedad en su conjunto y ponen en serio peligro la normal y pacífica convivencia de todas y todos”.
La ‘número dos’ del Gobierno melillense ha indicado que a estas medidas nacionales se suman las muchas actividades e iniciativas que su formación ha llevado a cabo desde la Dirección General de Relaciones Interculturales de la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad.
Por ello, ha criticado que “desafortunadamente, algunas formaciones, tanto locales como nacionales, han entrado en campaña electoral a base de mensajes de odio, con campañas dirigidas e enfrentar a las comunidades que conforman nuestra ciudad, empeñados en diferenciarlos y enfrentarlos por cuestiones religiosas, étnico-culturales o por sus preferencias vitales o sexuales”.
Cáculos electoralistas
Partidos que, por prejuicios o por cálculo electoralista, han venido planteando mensajes y acciones que conllevan el menosprecio y el odio contra personas o colectivos, ha dicho la socialista. “Algunas son totalmente burdas como las que nos tiene acostumbrados la extrema derecha, mientras que otras, que vemos en nuestra ciudad de la mano de formaciones tanto nacionales como locales y sus entidades satélites son pretendidamente más solapadas y sutiles, aunque igual de perniciosas para la convivencia de los melillenses”.
Gloria Rojas ha subrayado que la convivencia es un bien muy valioso que hay que cuidar, vigilar y defender. “Destruir todo en lo que la inmensa mayoría de los melillenses creemos y hemos contribuido a crear es mucho más fácil de lo que parece. No lo permitamos”. A su juicio, “lo que nos jugamos es mucho más que el color político del próximo gobierno de la ciudad, lo que nos jugamos es el propio futuro de Melilla”, por ello plantea: “¿Convivencia o ruptura?”.
