Mohatar confía en que la Ensenada de los Galápagos pueda estar operativa este fin de semana si no hay desprendimientos
La Ciudad Autónoma reabrirá al tráfico este viernes el Paseo Marítimo de Horcas Coloradas, después de que la carretera haya estado cortada al tránsito de vehículos mientras se desarrollaban unas obras. De este modo, se podrá acceder en vehículo hasta la zona de la Playa de Horcas, no así a la de la Alcazaba, que sigue inoperativa por los trabajos que se están desarrollando después de que se haya descalzado un muro y la empresa Tragsa haya tenido que llevar a cabo unas obras de emergencia.
A preguntas de los periodistas, el consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, confió también en que se pueda recobrar la normalidad en la Ensenada de los Galápagos este fin de semana si no hay desprendimientos.
Este problema obligó a cerrar esta emblemática cala, situada en Melilla la Vieja, mientras se llevaban a cabo unos trabajos de mallado para garantizar la seguridad de los bañistas.
Respecto a Aguadú, Mohatar admitió que la reapertura de esa playa va con retraso debido a que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) está desarrollando unos trabajos para instalar grandes tuberías, lo que obliga a realizar unas zanjas de dos metros.
“Son cuestiones sobrevenidas, de obras. Nuestra obligación es abrir al tránsito de vehículos esas playas, pero por diferentes motivos se ha retrasado”, reconoció el consejero.
Bandera azul
En cualquier caso, apuntó que el resto de las playas están operativas y, de hecho, informó de que la próxima semana visitará Melilla el presidente de Bandera Azul, un galardón que este año ha recaído en cuatro playas de Melilla. Rechazó las críticas de Isabel Moreno y Paz Velázquez, a las que acusó de decir “tonterías” y poner en tela de juicio el trabajo que desarrollan alrededor de un centenar de operarios en las playas.
