Dani Barrio es un cerrojo y ayer domingo el portero azulino volvió a demostrarlo en un escenario de lujo y ante un candidato al ascenso como es el Real Murcia. La U.D. Melilla volvió a dejar su portería a cero y sólo ha encajado un gol en los primeros cinco partidos de temporada. Sin duda, el equipo de Josu Uribe basa su buen momento en el rigor defensivo, aunque ante el cuadro grana pudo sacar mayor tajada de su visita a La Nueva Condomina, especialmente en los últimos minutos, cuando los unionistas jugaron en superioridad numérica tras la expulsión irreprochable del central pimentonero Morante.
Inmejorable puesta en escena del Melilla en La Nueva Condomina. Los de la Ciudad Autónoma, bien posicionados y mostrando un nivel táctico alto, controlaban todas las facetas del juego, maniatando a un conjunto como el murciano que quería llevar la voz cantante del partido. Sin embargo, todo era ficticio, pues apenas tenían presencia en ataque. El cuadro melillense llegaba peligroso y además con mucha gente. Nacho Aznar, David Cubillas y Santi Luque pusieron a prueba a los dos centrales del conjunto pimentonero, arrebatándole en última instancia el cuero Morante a Cubillas cuando se quedaban solo ante Simón.
El equipo de Paco García quería el balón, quería posesiones largas y buscar a un solitario Cuero arriba, pero tanto Richi como Sergio Sánchez se mostraban seguros en el corte y sobre todo en los balones aéreos. El Real Murcia dio un aviso con un tiro lejano de Armando muy flojo. Pero era más intentos vanos de unos y contras de otros que ponían el peligro sobre todo entrando por banda.
David Cubillas conseguía por su flanco terminar todas las jugadas, pero apenas llegaban los centros con garantías para los delanteros. El goleador azulinio, muy trabajador, tocaba todo lo que le llegaba, pero el espacio entre líneas era muy grande y tampoco podía tener asociación para afrontar la nutrida defensa local.
Josu Oribe cambió de bandas a Nacho Aznar y Santi Luque y el Melilla lo notó para bien, pues en desmarques y especialmente en pases verticales de Borja Prieto y Sufian daban más llegada, pero sobre todo mas claridad en la zona de tres cuartos, donde el equipo visitante se había hecho dueño y señor.
El local Sobregrau falló en un despeje claro y mandó el balón a saque de esquina. El servicio desde la izquierda quedaría muerto en el minuto 31 y ningún jugador azulino estuvo rápido para rematar. Habían pasado 35 minutos del tiempo reglamentario y sólo había habido un disparo sin peligro entre los tres palos por parte de los dos conjuntos.
El juego, cada vez más táctico y menos generador de ocasiones, comenzó aburrir a los aficionados que comenzaron a exigir a su equipo un paso más adelante, pero al Murcia le costaba porque el Melilla había cortado la fluidez de la línea media con los de arriba.
Los dos equipos se dejaron llevar en los últimos minutos, con un calor importante, para llegar al descanso con empate a cero goles.
El Melilla no estuvo reconocible en el segundo acto, dejando solo arriba a David Cubillas y defendiendo con todo. El cuadro pimentonero salió con todo en busca de la portería de Dani Barrio que al minuto de la reanudación veía cómo Cuero en pugna con Sergio Sánchez, no conseguía empalmar claramente. El balón se fue a corner.
No obstante, la Unión Deportiva pudo adelantarse en un fallo grave de Simón, que no consiguió controlar un balón claro en el minuto 48, el cuero le quedó a Cubillas, que no se lo esperaba, y de cabeza envió fuera.
Pese a ello, el partido era del equipo grana, que había conseguido que los melillenses sólo defendiesen. La generación de juego se plasmaba en ocasiones para los anfitriones. Roberto Alarcón, en el 52′, remató sólo en el área sin encontrar portería. Después era Titi que acababa de entrar el que no aprovechó un centro de Pumar desde la izquierda para que sólo cabecease, parando el balón Dani Barrio con los pies.
El Melilla intentaba parar el partido como podía, pero el Murcia seguía percutiendo y Sobregrau en el minuto 64 hizo que el portero melillense fuese el mejor del partido, parando a quemarropa un tiro muy centrado del capitán grana.
En los últimos minutos, el Murcia quería y el Melilla a la contra lo intentaba. Así, el cuadro local tuvo que parar una salida de David Vázquez en falta por mediación de Morante lo que suponía la expulsión. El partido languideció jugando los unionistas con un hombre más y sumando así un punto muy importante lejos del Estadio Municipal Álvarez Claro.
