La Delegación del Gobierno en Melilla se sumó ayer a la celebración del Día Internacional de la Mujer con la lectura de una declaración institucional aprobada por el Consejo de Ministros unos días antes del 8M. En ella, el Gobierno central recuerda su “firme apoyo al movimiento feminista y a sus demandas” y muestra su “compromiso” por “convertir estas reivindicaciones en políticas útiles y reales para el conjunto de la sociedad”. Una veintena de personas leyeron la extensa declaración, de casi cuatro folios. Entre ellas, estaban todos los responsables de la Administración periférica del Estado en Melilla, además de dos consejeras de la Ciudad Autónoma, concretamente la vicepresidenta primera, Gloria Rojas, y la consejera de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad, Elena Fernández Treviño, que fue, hasta su entrada en el Gobierno local, jefa de la Unidad contra la Violencia de Género de la Delegación del Gobierno.
Asimismo, participaron en la lectura responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en concreto el jefe superior de Policía, Francisco Rodríguez, y el segundo jefe de la Comandancia de la Guardia Civil, el teniente coronel Arturo Ortega. Varios funcionarios también tomaron parte en la lectura, que se prolongó durante casi un cuarto de hora, en el patio de entrada de la Delegación, teñido de color violeta por las prendas de vestir y las mascarillas de muchos de los asistentes.
El Ejecutivo asegura en el texto al que se dio ayer lectura que está comprometido “con desplegar un paquete de medidas públicas que avancen hacia una transición económica basada en el cuidado y la reparación social, no reproductora de las desigualdades entre mujeres y hombres y con promover dichas políticas públicas en el plano internacional”.
Unos compromisos que, según apunta, estarán “alineados en el plano internacional con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y con la Estrategia Europea de Igualdad de Género 2020-2025, y contenidos en el Acuerdo del Programa de Gobierno de España para la XIV Legislatura y en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia 2021-2024”.
En la declaración institucional, el Gobierno destaca que España se ha convertido en uno de los epicentros de las grandes movilizaciones feministas que desde el 2018 se han sucedido en todo el mundo y se ha consolidado en el ámbito internacional y multilateral como uno de los países impulsores de los avances en la igualdad de género.
“El empuje feminista institucional y social, sin embargo, no ha conseguido que los avances se aceleren ni que estos se consoliden. Entonces ¿cuáles son las resistencias que bloquean lo que ya existe dentro y fuera de las instituciones? Las respuestas son múltiples, pero hay una incontestable: la resistencia al avance feminista se explica por ser mujeres”, afirma.
