La U.D. Melilla B consiguió sumar los tres puntos en juego ante la A.D. Huércal y tendrá que esperar a hoy domingo para saber si mantendrá alguna opción de mantener la categoría en la última jornada o si matemáticamente certifica su descenso esta tarde. Si Los Villares, Ronda y Los Molinos empatan o ganan en esta penúltima jornada se consumará el descenso de los melillenses, que no jugarán el próximo fin de semana por la retirada de la Unión Estepona y se le dará por ganado el partido por 0-2. El conjunto filial sólo se salvaría si alguno de estos tres equipos pierden sus dos partidos.
El filial azulino se impuso al conjunto almeriense por un claro 3-0, en un partido que pudo acabar con un marcador más abultado, ya que los melillenses perdonaron innumerables ocasiones ante el marco defendido por Eusebio, el gran protagonista del equipo almeriense.
Carrusel de ocasiones
El partido fue un auténtico monólogo del Melilla B, que fue superior al Huércal de principio a fin, aunque tardó en subir el primer tanto al marcador, precisamente por la ansiedad de los locales por la obligación de ganar para mantener aún opciones de evitar el descenso.
El carrusel de ocasiones se inició pronto, ya que a los seis minutos Sufian falló una clamorosa ocasión debajo de los palos, enviando incomprensiblemente el balón fuera, a pase de Melik, que recibió un pase en profundidad de Bécker desde el centro del campo.
Los locales pusieron cerco a la meta almeriense y siete minutos después el cancerbero Eusebio se lució en dos acciones consecutivas de Koeman y Melik, evitando el primer tanto de la tarde.
El Huércal lo intentó a los dieciocho minutos, en una internada de Rubén, que mandó el cuero fuera, cerca del palo izquierdo.
La Unión Deportiva volvió a la carga a diez minutos del final, en otra gran oportunidad de Sufian, que se entretuvo en su disparo, con la portería a placer, y finalmente un defensor salvó debajo de los palos.
La última oportunidad de la primera mitad fue para el equipo almeriense, que también perdonó ante el portero Jesús. Fran Herrada se plantó sólo ante el cancerbero melillense y éste salvó el posible 0-1, despejando a córner, tras disparo raso y cruzado del delantero visitante.
Los goles, en la segunda parte
Los locales continuaron con su intensidad en la reanudación, aunque los nervios comenzaron a pasar factura porque el gol se le negaba a los de Felipe Sánchez, ya que éstos generaban ocasiones pero no había recompensa ante el portero andaluz, aunque el Huércal volvió a perdonar al minuto de juego, en una falta lateral que Sergio remató flojo, con la cabeza, a las manos de Jesús.
El Melilla B dispuso de la primera gran ocasión a los cincuenta minutos, pero el remate a placer de Hamin salió alto, cuando ya se cantaba el gol en las gradas, tras una preciosa jugada por la banda derecha de Melik, que dejo pasar Koeman para el capitán del plantel melillense, y tres minutos después Melik se plantó sólo ante Eusebio, tras un pase en profundidad de Koeman, y el cancerbero desbarató una ocasión clarísima para desnivelar la balanza.
Melik volvió a ser el protagonista seis minutos después, tras una gran jugada de Sidi II, pero de nuevo se estrelló ante Eusebio, que despejó a córner.
A renglón seguido, el entrenador melillense movió ficha y realizó un cambio clave para el desarrollo final del encuentro, ya que introdujo a Ali por Melik y en el primer balón que tocó el joven jugador, a los sesenta y cuatro minutos, pasó sobre Koeman y éste centró para que Hamin rematase con la testa a la red.
El gol dio tranquilidad y el Huércal terminó derrumbándose, ya que un minutos después Koeman sorprendió con un trallazo cruzado y raso, dentro del área, y el balón entró a la red.
Los locales sentenciaron y Ali pudo marcar de no ser porque el larguero repelió un remate de cabeza del joven futbolista melillense a los setenta y tres minutos, aunque a ocho minutos del final consiguió marcar, desde fuera del área, aunque tuvo la colaboración de un defensor, ya que el balón pegó en el cuerpo de éste y descolocó a Eusebio.
