El puente del Pilar ha hecho que muchos melillenses cojan las maletas para ir a las regiones más cercanas en Marruecos o Andalucía. Sin embargo, no todos pudieron irse y esos son los que pudieron disfrutar ayer de un día festivo en la ciudad, que estuvo acompañado de hasta una máxima de 28 grados. Y es que algunos por motivos laborales, y otros por cuestiones económicas, no pudieron salir de la ciudad. Aún así, quienes decidieron quedarse pasaron el día fuera de casa y disfrutando de los restaurantes y bares que decidieron abrir sus puertas el día festivo, así como de los parques y plazas de la ciudad.
No todos los ciudadanos de Melilla han decidido coger las maletas durante el puente del Pilar, algunos se han quedado en la ciudad por motivos laborales, económicos o porque así lo hubieran decidido voluntariamente. Ayer, día festivo en la ciudad muchos melillenses aprovecharon el día para disfrutar de la máxima de hasta 28 grados que pudo registrarse al medio día en Melilla. La idea de inicio para las familias melillenses es irse durante estos tres días de puente fuera, y muchos lo llevan a cabo en especial hacia Andalucía, Madrid y las regiones más cercanas de Marruecos como Saidía. Sin embargo, no todos han tenido la misma oportunidad, al ser el sábado laboral algunos melillenses no pudieron salir, sobre todo aquellos que trabajan en los establecimientos comerciales y de hostelería. Otras familias melillenses achacaban su estancia durante el puente a la situación económica. «La crisis no deja salir a todo el mundo», comentaba un padre que había aprovechado el día para pasar con sus hijos en el Parque Hernández, una de las zonas en las que ayer se podían ver algunas familias disfrutando del buen tiempo. Ahora bien, quienes se quedaron, le sacaron el máximo partido. Algunos melillenses salieron con sus hijos a dar un paseo por la ciudad, para luego ir a comer fuera de casa, y es que quienes no descansaron ayer, fueron sobre todo los trabajadores de la hostelería, en un día que para quienes se han quedado en la ciudad es uno de los planes principales. No fue así en el caso de los comerciantes, ya que ayer la Avenida Juan Carlos I, más allá de los bares y restaurantes que decidieron abrir, todos los comercios estaban cerrados con motivo del día festivo. De la misma manera, al igual que otros se quedaron en la ciudad, algunos no pudieron irse por falta de billetes y otros volvían ayer por la mañana para también poder disfrutar de un día de descanso antes de iniciar hoy de nuevo la jornada laboral.
