La Policía Local ha detenido en Melilla a un argelino que tenía pendientes dos reclamaciones judiciales de búsqueda por robo con fuerza en el País Vasco, concretamente en los juzgados de San Sebastián y Álava. Según informó ayer la Consejería de Seguridad Ciudadana en una nota de prensa, esta detención tuvo lugar el pasado martes a primera hora de la tarde sobre las 13.00 horas, cuando el Grupo de Prevención y Reacción (GPR) procedió a identificar a este individuo porque estaba consumiendo bebidas alcohólicas en la vía pública. Este individuo, cuyo nombre corresponde a las iniciales W.A., fue trasladado a la Jefatura Superior de Policía de Melilla para su posterior puesta a disposición judicial. Pocas horas después, ya en la madrugada de ayer, la Policía Nacional y la Policía Local llevaron a cabo una actuación conjunta que se saldó con la detención de otro argelino como presunto autor de un robo en el interior de un vehículo que estaba estacionado en la Cuesta de la Alcazaba.
Los hechos ocurrieron concretamente a las 1.25 horas, cuando un ciudadano llamó al 091 para alertar de que un individuo estaba revolviendo en el interior de un coche. Una patrulla de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) se aproximó al lugar, donde comprobó que un coche tenía la ventanilla trasera derecha fracturada y que había un individuo dentro, el cual se dio a la huida cuando se dio cuenta de la presencia policial.
En ese momento se inició una persecución a pie en la que participaron policías nacionales del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), vestidos de paisano, y policías locales que terminó en los acantilados cercanos, donde el presunto ladrón había tratado de esconderse aprovechando la oscuridad y la orografía del terreno. No obstante, fue localizado oculto en un risco, lo que permitió su detención. Se trata de L.H, de 18 años de edad y nacionalidad argelina, que fue trasladado a la Jefatura Superior. Tiene antecedentes por robo co fuerza.
Retrovisores
Por último, la Policía Nacional detuvo el martes por la tarde a un marroquí de 38 años como presunto autor de un robo en vehículos. En concreto, de 12 espejos retrovisores, seis de los cuales llevaba encima en el momento de la detención, cuando pretendía pasar a Marruecos por la frontera de Barrio Chino.
Esta actuación corrió a cargo del Grupo Operativo de Fronteras (GOF), que sospechó de un individuo que pretendía salir de Melilla. Tras un cacheo superficial, le hallaron ocultos entre sus ropas seis espejos retrovisores de vehículos de distintas marcas, así como unas tijeras con la punta doblada con las que, presuntamente, había hecho palanca. La Policía sospecha que es el presunto autor del robo de otros seis espejos de coches estacionados en diferentes zonas de Melilla.
