2.09.1775.- Real Cédula, por la que se conceden 600 Reales para atender el Culto de San José.
2.09.1775.- Se asignaron 600 reales para la función del día de San José en conmemoración del Levantamiento de El sitio de Melilla 1774-1775. (G. Morales).
9.12.1775.- Antonio Nertus, Soldado de la 1ª Cía. del Rgto. Nápoles, de Rohoteulae, Alemania, enterrado 10.12.1775 en el Cementerio de esta Parroquia. Rubricado Cura Josef Guerrero, Vicario.
1776 a 1783.- José de Molina Larios, Obispo de Málaga.
1777.- Antonio Casa Osuna, Sacristán.
1777-1811.- Libro II de Bautismos. (Lisardo Guede).
23.01.1777.- Vicario de Melilla, D. José Guerrero.
26.01.1777. D. Nicolás Quijano es nombrado Gobernador.
Un día de primeros de julio de 1.777 siendo gobernador interino Nicolás Quijano, ocurrió un hecho que constituyó una sorpresa sangrienta de las más viles que hasta entonces se habían cometido. Cuando a eso de las cinco de la mañana los soldados salieron a hacer la descubierta por la Puerta del Campo, cerca del Fuerte de Santa Bárbara; como de costumbre, los fronterizos aguardaban la hora de entrada para vender sus mercancías, algunos se adelantaron hasta la misma puerta y se pusieron a conversar amistosamente con los hortelanos, pidiéndoles algunas que otras hortalizas, el cabo de la kábila también departía con el Ayudante Mayor de la Plaza, José Naranjo. De pronto, un moro se abalanza sobre un soldado pistola en mano, lo mata, casi lo degüella, y al acto se abalanzan más de sesenta fronterizos armados sobre nuestros soldados, mientras otros agredían a los descubridores. Pronto se repuso la fuerza de aquella sorpresa, pero entre tanto mataron a Cristóbal Ramírez, Martín Hidalgo y Francisco Ruiz, los tres desterrados y soldados voluntarios de la Compañia Fija de Antonio Manso. Sus cadáveres no pudieron rescatarse hasta la noche, y con la fuerza de las armas. De esta reyerta resultaron tres heridos graves, Antonio Herrero, Antonio Estévez y Antonio Delgado, de la Compañía del Mayor de la Plaza, José Naranjo, y que murieron debido a las heridas en los días 12, 13 y 19 del mismo mes, respectivamente.
30.01.1777.- Fray Nicolás de Cuéllar y Berdugo, religioso Mínimo del Convento de Málaga, Cura de esta Iglesia y Capellán del Real Hospital.
29.10.1777.- Josef Calderón desterrado, enterrado en la Iglesia de Ntra. Sra. de la Concepción.
6.11.1777. D. Bernardo Tortosa, es nombrado Gobernador.
1778. Desde tiempo inmemorial existían en Melilla perros amaestrados para comunicar la Plaza con los fuertes exteriores avanzados. Su ración figuraba en el presupuesto. Consistía en un trozo de bizcocho “Averiado”, o porque estaba desmenuzado, y no servía para darlo a la tropa, más una libra de mazamorra. Entonces había siete perros, y el Gobernador aprobó una medida para suprimirlos, dejando solamente dos “como memoria”.
30.06.1778.- Fallece el Presbítero D. Cayetano Benítez. Su sobrino, Francisco Robles, colaboraba en el Hospital. El desterrado Francisco Rubio, su cuidador trabajaba en la Iglesia.
15.07.1778.- Cura, Adrián Páez.
5.11.1778. Real Orden por la que se facilitarían los medios de reconstrucción de sus casas a todo aquél que la hubiese perdido en el Asedio y bombardeos posteriores, la condición que debía regir era que se rebajasen en un 25% los alquileres.
Miguel Zazo Camacho, Capitán Graduado y Tte. de una de las Compañías Fijas, nació en Melilla, de una familia con más de dos siglos de arraigo en la ciudad, prestaba sus servicios en la ciudadela. Este oficial había tomado parte muy activa y valerosa, en la “guerra de minas” durante el Sitio de 1.774-1.775. El 1.02.1.775, en unión del Teniente Antonio Falcón, hizo volar una contramina, ocasionando el hundimiento y destrucción de la mina de los sitiadores entre los fuertes Rosario y la Puntilla. D. Juan Sherlock les felicitó en una ceremonia en la Plaza de la Avanzadilla de Santiago. Por los méritos contraídos durante el Sitio, fue ascendido a Capitán.
1779. Los moros habían emplazado varios “ataques”, a la izquierda de la desembocadura del río de Oro, (Muro X, y actual Pº General Macías).
Para descubrirlo y poder combatirlo, el 3.07.1779 con ocasión de una salida de reconocimiento, embarcaron algunos soldados en una lancha capitaneada por Miguel Zazo, para destruir uno de esos “ataques”. Los fronterizos observaban la salida, y cuando tuvieron la embarcación al alcance de nuevos parapetos escondidos entre cañaverales, hicieron una descarga sobre ella, un certero disparo en la frente de Miguel Zazo le ocasiono la muerte en el acto. Así acabó su vida uno de los más bravos oficiales, que tanto se habían distinguido durante el Sitio por su valor y arrogancia. El Cadete José Sasso, cayó muerto ese mismo día.
Cuando ocurrían estos hechos, existían en Melilla los Regimientos:
Cataluña, Nápoles, Princesa, Zamora, Brabante y Bruselas.
