Coalición por Melilla (CPM) pidió ayer a la Ciudad Autónoma que no excluya de los sorteos para adjudicar viviendas sociales a familias desfavorecidas que tienen deudas pendientes con la Administración local por impago de tasas o de sanciones, como va a ocurrir en el próximo sorteo de 107 VPO. En rueda de prensa, el portavoz cepemista en la Asamblea, Hassan Mohatar, expresó la preocupación de su partido porque “mucha gente se va a quedar sin entrar en el sorteo por esas deudas” y, a su juicio, es precisamente con el sector de la población más desfavorecido con el que se debe tener “cierta sensibilidad”. Mohatar admitió que la Ley está para cumplirla y CPM no se puede negar a que los ciudadanos no afronten sus obligaciones tributarias, aunque recordó que hay personas en Melilla que no tienen ingresos ni recursos económicos, y otras que únicamente viven con una pensión no contributiva inferior a 300 euros.
La escasez de recursos de estas familias les impiden en muchos casos afrontar el pago de alguna tasa o sanción, motivo por el que se están quedando fuera del sorteo y sin posibilidad de poder optar a una vivienda social, aun teniendo necesidad de ella.
De ahí que el diputado pidiera a la Ciudad Autónoma que tenga “cierta consideración” con las situaciones “extremas” y para los próximos sorteos tengan en cuenta este problema, siempre que las familias desfavorecidas puedan demostrar que el impago de los tributos y las deudas con la Administración se debe a que no pueden afrontar ese desembolso.
Mohatar explicó que la próxima celebración de este sorteo ha recibido 600 alegaciones, de las cuales ya han sido analizadas unas 90 en el Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Melilla (Emvismesa), de las cuales unas 60 aludían a los errores materiales cometidos por este organismo en la tramitación de las solicitudes.
