El diputado de Coalición por Melilla, Emilio Guerra, afirma que seguimos “a la espera” de contestación del Gobierno Imbroda, tras las aportaciones registradas para encontrar una moción consensuada en cuanto a la pérdida del 50% de bonificación a las cuotas de la Seguridad Social de los empresarios locales.
Para el cepemista, “no existe otra vía que la de la iniciativa legislativa”, un importante recurso que, a su juicio, “apenas si se ha utilizado a lo largo del tiempo porque supone incomodar y dejar en evidencia al gobierno de turno en Madrid, y eso, ningún partido nacional instalado en la ciudad tiene el valor de abordarlo”.
La petición de una moratoria en la aplicación de la nueva normativa, algo en lo que sí coinciden los partidos proponentes de la moción conjunta, “no es más que un formalismo”, dijo Guerra, ya que aseguró “no tener ninguna esperanza en que el Gobierno de la Nación acceda y solucione el problema motu proprio”.
Desde todas las perspectivas, “nada de lo que está ocurriendo en Melilla es fruto de la casualidad, es una hoja de ruta”, afirmó, y añade: “creo que vamos camino hacia una economía totalmente tutelada y subsidiada por el Estado, donde no quedará margen ni para el emprendimiento ni para las pymes locales, salvo aquellas que facturen exclusivamente a las administraciones”.
Guerra relata acontecimientos como el cierre fronterizo, la frontera comercial, la liquidación del comercio atípico, las trabas burocráticas aduaneras, el irresuelto problema de las bonificaciones al transporte de mercancías y de viajeros, así como ahora la pérdida del 50% de bonificación a las cuotas de la Seguridad Social para los empresarios, etc. Todo ello, “no puede ser fruto de la casualidad y deberíamos preguntarnos ¿hacia dónde nos lleva y cuáles serán las consecuencias?”, añade Guerra.
Coalición por Melilla, seguirá apostando por una política localista y progresista, porque es la más eficiente para crear algo que algunos tienen orden de combatir: “la conciencia de comunidad empoderada con arraigo y pertenencia, además de desarrollar la tolerancia y el respeto en un auténtico entorno de igualdad de oportunidades para todos”, afirma el cepemista.
Desgraciadamente, finalizó Emilio Guerra, “la ciudad no evoluciona conforme a la realidad social y a los intereses de este pueblo en su diversidad, sino conforme los dictados de quienes manejan el poder lejos de aquí”.
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