La palabra 'obras' en un barrio ya parece resonar como algo negativo y tedioso en algunas ocasiones para comerciantes y vecinos. Sin embargo, las personas que viven y/o trabajan en el Industrial, celebran la renovación del asfalto de una de las principales vías de la ciudad, Álvaro de Bazán, dado que no se arreglaba desde el año 1991. Aún así, ambos colectivos, aunque en especial los comerciantes, esperan que no se alargue más de lo establecido, dado que si bien agradecen estas actuaciones, admiten que genera pérdidas en alguna ocasión hasta del 50 por ciento de los beneficios diarios. MELILLA HOY toma el pulso a algunos vecinos y comerciantes del barrio del Industrial para saber qué opinan sobre las actuaciones que se acometerán durante dos semanas en una de las principales vías que cruza la ciudad desde la frontera de Beni-Enzar hasta el Puerto de Melilla, la calle Álvaro de Bazán, en cuyo pavimento no se actuaba desde 1991.
Félix Esteban es uno de los trabajadores de una empresa de pintura situada en la misma calle. El melillense señala que ve bien que hagan este tipo de actuaciones dado que la situación del asfalto hacía que los vehículos generaran "mucho ruido" al pasar por la vía.
Por su parte, Hassan Mohamedi, dueño de un establecimiento de repuestos de motos y bicicletas, celebra las obras aunque espera que no se alarguen demasiado. Y es que su clientela desplaza sus vehículos hasta el lado de la tienda y al cortar la calle ya no pueden ir hasta su taller. Esto hace que ya el primer día notaran un descenso de hasta el 50 por ciento de la clientela. Aún así, asegura que dicha actuación beneficiará, aunque a largo plazo.
María del Carmen es una vecina del barrio del Industrial, que también celebra la reparación del asfalto de la calle. Y es que además del ruido que generan de por sí los coches que van a mayor velocidad de la permitida y con la música con alto volumen, se sumaba los ruidos de un asfalto ya deficitario.
No piensa igual Hussein Mohamed, quien no oculta su descontento por estas actuaciones dado que le afecta directamente a su negocio. Él posee una tienda de repuestos de automóvil en la que ya ayer notaba un descenso de la clientela. Asegura que en la calle General Astilleros la situación del asfalto es peor, pero no está tan mal en la calle Álvaro de Bazán.
Por último, Mohamed Hadi, vecino de "toda la vida" del barrio, aseguró que está bien que se hagan este tipo de actuaciones, no solo por renovar la imagen del barrio, sino porque se mueva la economía de la ciudad dada las altas cifras de desempleo. Señala que quizás hubiera hecho falta habilitar otras zonas de aparcamiento, pero asegura que "le hacía falta" una remodelación al asfalto de la calle.
