Un resumen apresurado sobre las elecciones de ayer. En Melilla, lo previsto, con muchas dificultades y en ambiente hostil: repetición, muy competida, de la victoria del PP -vaticinio de nuestro periódico confirmado y mi enhorabuena a los vencedores- un aumento, por encima de lo vaticinado, del PSOE y desilusión final de CpM. En el conjunto de España, resultado muy peligroso para España y confirmación de que el PP, que a duras penas ha mantenido el segundo puesto, necesitaba el cambio para no desaparecer.
Con respecto a las, para nosotros, cercanas y vitales elecciones locales, dos comentarios. El primero, la experiencia nos demuestra que los resultados de las elecciones nacionales no son extrapolables a las locales, así que ya iremos viendo y actuando. El segundo, no cabe pensar que el PP local va a obtener mayoría absoluta el 26 de mayo. Queda mucho que pensar y por hacer.