REAL VALLADOLID 90-93 CLUB MELILLA BALONCESTO
Los de Rafa Monclova disputaban ayer su primer encuentro de la gira de pretemporada
El Club Melilla Baloncesto afrontó ayer su primer compromiso de la minigira peninsular y lo hizo ante el potente Real Valladolid, un choque en el que los melillenses siempre estuvieron dentro del mismo con un juego de alto nivel y, sobre todo, sabiendo jugar a la perfección los últimos compases del encuentro para conseguir el triunfo por el resultado de 90-93.El conjunto azulón comenzaba anotando con mucha facilidad, aunque sin poder asentarse a nivel defensivo. En los primeros cinco minutos el electrónico reflejaba un tanteo de 13-17, aunque los vallisoletanos reaccionaban y, gracias a un parcial de 8-2, se colocaban por delante en el marcador, 21-19. A pesar de este revés, los melillenses se sobrepusieron y se metían de nuevo en el partido, llegándose a la finalización de este cuarto con empate a 26.
El segundo acto se caracterizó por la igualdad existente entre los dos equipos durante la mayor parte de los minutos, aunque también es cierto que los de Rafa Monclova siempre llevaron la iniciativa en el luminoso con pequeñas ventajas. En los últimos ataques el acierto de cara al aro de los azulones fue clave para que se marcharan al intermedio con una renta favorable de seis puntos (46-52).
Tras el tiempo de descanso, el Real Valladolid pareció salió más enchufado que lsu rival, por lo que al ecuador de este tercer cuarto se situaban otra vez arriba en el electrónico, 61-59. Los de la ciudad autónoma supieron mantenerse a flote en sus peores momentos del encuentro y al término de este periodo sólo perdían por 74-70, con un parcial a favor de los locales de 28-18.
Con las espadas en todo lo alto arrancaba un emocionante último asalto, en el que decano tuvo un inicio arrollador con un 0-7 de salida, colocándose con una ventaja de tres puntos. A pesar del buen juego de los visitantes, los pucelanos nunca se desengancharon del marcador y lograban, con un triple, igualar el choque (83-83). El Melilla Baloncesto, pese a la presión del equipo y de los aficionados locales, pudo finalmente saborear las mieles del triunfo por 90-93.
