Los de Gonzalo García sufrieron un duro castigo (105-78) ante el TAU Castelló y se mantienen a tres victorias de la salvación, pero ya a sólo cuatro jornadas del final
El Melilla Sport Capital Baloncesto firmó un buen primer cuarto pero se desmoronó en el segundo para irse al descanso once puntos abajo. A la vuelta de los vestuarios la cosa fue a peor, encajando un 33-13 que decantó el partido.
El Melilla Sport Capital Baloncesto afrontaba ayer este duelo ante el TAU Castelló con la imperiosa necesidad de conseguir una victoria a domicilio, aunque para ello tenía que derrotar a un rival que apura sus últimas oportunidades de clasificarse para los play off de ascenso a la ACB.
Lo cierto es que el inicio de ambos equipos fue muy dubitativo y con una anotación muy baja, sumando entre los dos conjuntos seis puntos (2-4) en los tres primeros minutos de partido. Al ecuador del primer cuarto se llegaría con los locales mandando en el electrónico (11-6), con un juego interior imponente de Xavi Rey ante la defensa en zona de los melillenses. Javi López salía muy enchufado a la cancha y anotaba un triple que situaba al decano por delante después de seis minutos sin conseguirlo.
Finalmente, los de Gonzalo García de Vitoria lograrían marcharse con cinco puntos de ventaja al término de este periodo (17-22).
El segundo asalto comenzaba de la peor manera posible para los visitantes, que recibían tres triples consecutivos de Ezekiel Alley para empatar el choque (26-26). El parcial continuaba abierto para los castellonenses, que firmaban un 12-1 y obligaba al técnico del Melilla Baloncesto a solicitar un tiempo muerto (29-27). Los de Juan Antonio Orenga remontaban con un juego exterior imperial, de la mano de Ezekiel Alley, con doce puntos en tan sólo cinco minutos.
El TAU Castelló secaba en ataque a los melillenses, quienes después de siete minutos únicamente anotaban diez puntos, que comparándolos con los 26 de los locales se quedaban en una minucia (43-32). En los últimos segundos de este periodo la distancia se mantuvo y, por tanto, los jugadores del decano se retiraban al túnel de vestuarios, tras un mal cuarto y con un parcial en contra de 31-15, perdiendo por once puntos (48-37).
Los levantinos arrancaban la segunda parte del encuentro con ganas de sentenciar y el choque encaraba esa situación, ya que el Melilla Baloncesto no conseguía meterse en el mismo (58-41). Los locales seguían intratables desde la línea del 6.75, lo que sumado al gran acierto interior, con un Xavi Rey y un Ezekiel Alley como protagonistas, hacían que llegase la máxima diferencia del partido, 21 puntos (62-41). A partir de este momento, la diferencia no paraba de aumentar, estableciendo los de Juan Antonio Orenga la máxima justo a la conclusión del tercer asalto (81-50).
Los últimos diez minutos no tuvieron demasiada historia, con un TAU Castelló que apenas aflojó su intensidad y acabó venciendo por un contundente 105-78. El duelo estuvo marcado por los triples convertidos por los castellonenses, que tuvieron un porcentaje del 60%, con 21 triples en 35 intentos. Sin duda, en una de las peores noches del Club Melilla Baloncesto en ese aspecto.
El próximo partido del decano será frente al Grupo Alega Cantabria el domingo día 30, a las 12’00 horas, en el Pabellón Javier Imbroda.
