El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha reivindicado este viernes el «balance muy positivo» de la Reunión de Alto Nivel (RAN) con Marruecos , tras las críticas por la falta de concreción en fechas y demás, ha señalado que no adelantan datos sobre la reapertura de la aduana de Melilla por un tema de seguridad: “No queremos avalanchas, contrabando ni imágenes indignas del pasado» ha aseverado este viernes en sendas entrevistas en Canal Sur Televisión y en La Sexta.
El titular de Exteriores ha insistido en señalar que ambos países tienen acordado “un calendario pactado» para reabrir la aduana de Melilla y crear una nueva en Ceuta «de forma ordenada y gradual»
Frente a las críticas del PP por la ausencia de Mohamed VI en la RAN, el titular de Exteriores ha defendido que «una cumbre de alto nivel no se juzga por las fotografías, sino por los resultados», entre los que ha destacado la caída de la inmigración irregular en 69% en Andalucía y un 82% en Canarias durante el mes de enero, las «cifras históricas» de las exportaciones españolas y la recuperación de conectividad marítima y de la Operación Paso del Estrecho (OPE). «No hay un presidente del Gobierno de España en democracia que haya tenido una relación tan estrecha y tan personal con un rey de Marruecos. Pedro Sánchez es el presidente del Gobierno que más veces se ha reunido con el rey Mohamed VI, ha compartido un iftar en el que estaba su heredero y toda la familia, algo que ocurre muy pocas veces con el rey de Marruecos con ningún jefe de Estado de Gobierno del mundo y sin embargo, sí lo ha hecho con Pedro Sánchez», ha resaltado Albares, que ha argumentado que la «llamada telefónica previa pactada» entre Sánchez y Mohamed VI «en vez de una audiencia protocolaria a posteriori permitió dar un impulso al arranque» de la RAN y que la «invitación personal» al presidente del Gobierno para una próxima visita «no es frecuente por parte del rey de Marruecos».
El titular de Exteriores ha asegurado que la RAN ha permitido «reforzar el diálogo político para que en adelante esas crisis repetidas que han salpicado la relación con Marruecos desde la llegada de la democracia sean parte del pasado, porque nos vamos a basar en el respeto y el beneficio mutuo», además de reforzar el «partenariado económico» al abrir la puerta a un plan de inversiones que tiene Marruecos de 45.000 millones de euros en sectores en los que España tiene mucho que aportar, como el saneamiento de agua o el ferroviario.
Además ha resaltado la veintena de acuerdo suscritos en materia de lucha contra la inmigración irregular y las mafias que trafican con seres humanos y contra el yihadismo y el acuerdo para extender las secciones bilingües en español en cien colegios marroquíes.
El ministro ha sido especialmente duro con la reacción del PP, al que ha acusado de «ningunear la relación de España con Marruecos y no comprender la importancia de lo que todos los ministros de Asuntos Exteriores y todos los ex presidentes del Gobierno de la democracia española han calificado como la prioridad número uno de la política exterior», con lo que, a su juicio, «se demuestra que el PP está totalmente incapacitado para gobernar España».
«¿Queremos volver a tiempos de choques como el de Perejil? Yo creo que es mucho mejor en estos momentos y siempre la cooperación, la amistad, el respeto mutuo y el beneficio mutuo, las no acciones unilaterales con nuestros vecinos, sobre todo con aquellos con los que tenemos una frontera terrestre. ¿Se imaginan esas palabras del Partido Popular hacia Portugal o hacia Francia?», se ha preguntado.
