Francisco Benítez Muñoz quiere dar las gracias que ha recibido su familia por las muestras de cariño y apoyo tras el fallecimiento, el pasado viernes, de su hermano Manuel, a los 76 años de edad, pero sobre todo ha expresado su gratitud hacia los profesionales del Hospital Comarcal de Melilla «por el gran trato» dispensado a su hermano durante el tiempo que estuvo ingresado en el centro hospitalario. Manuel Benítez Muñoz fue presidente de la Federación Melillense de Ajedrez y del Casino del Real, así como ex directivo del extinto Industrial Melilla, equipo que llegó a militar en Tercera División.
El que fuera presidente de la U.D. Melilla y del Industrial Melilla destacó, en primer lugar, el excelente comportamiento de los profesionales del Hospital Comarcal hacia su hermano. «Durante su estancia en dicho centro ha habido un comportamiento muy bueno de los médicos, de los enfermeros y demás personas. Les agradezco su comportamiento y tratamiento hacia la persona de mi hermano».
De igual modo, se mostró agradecido por las muestras de cariño que su familia recibió en el sepelio. «Quiero agradecer la asistencia de sus amigos para despedirse de él y a quienes nos han dado el pésame, mostrándonos todo su cariño, además de recibir muchas coronas, en especial las oficiales de la U.D. Melilla, de la Federación Melillense de Fútbol y del Casino del Real, así como de los compañeros íntimos de Manolo, que han estado con él hasta el último día. No puedo citar todos los nombres porque han sido muchos y ellos lo saben».
En otro orden de aspectos, el ex dirigente del fútbol habló sobre la faceta deportiva y humana de su hermano. «Su afición más grande ha sido el ajedrez, así como otros juegos de mesa, como el parchís y el dominó, entre otros, pero también fue dirigente del Industrial Melilla de fútbol. También le gustaban los campeonatos de fútbol en Santa Bárbara y en el Tesorillo, pero en su tiempo también jugó al fútbol, en plan aficionado, como lo he sido yo».
«Llegó a ser presidente de la Federación Melillense de Ajedrez y del Casino del Real, dedicándole su tiempo a ambas entidades con mucha ilusión y amor, mientras que en lo personal tuvo un corazón muy grande para todos su familia y amigos. Era una persona muy sencilla, noble y con un corazón grande», resaltó.
Además, indicó que Manuel Benítez «era un enamorado del fútbol base, mientras que del profesional estuvo más retirado».
«Un abrazo para toda la familia y amigos», concluyó Francisco Benítez Muñoz.
