La Policía Nacional ha detenido a tres individuos, dos de los cuales han ingresado en prisión provisional, como presuntos autores de delitos de lesiones graves y robo con violencia, después de robar a tres personas, a una de las cuales está en coma en la UCI al arrojarla al cauce seco de un río desde una altura de 5 metros. En una nota de prensa, la Jefatura Superior de Policía de Melilla ha informado de que los hechos ocurrieron el pasado día 17, cuando la Sala del 091 recibió una llamada informando de la presencia de dos heridos en el cauce del Arroyo Mezquita a la altura de la Ciudad del Fútbol, en los Altos del Real. A los pocos minutos llegó al lugar una dotación policial del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) que se encontraba próxima, que pudo comprobar que en el cauce del arroyo había una persona inconsciente sangrando por la cabeza.
Los agentes solicitaron inmediatamente una ambulancia, que trasladó al herido al Hospital Comarcal.
Junto a este había otras dos personas con heridas menores, que manifestaron que tres individuos les habían agredido con un palo para robarles un teléfono móvil y, a continuación, les arrojaron al lecho del arroyo desde una altura considerable.
Asimismo, apuntaron que una de las personas que acompañaba a los agresores se encontraba junto a ellos, por lo que fue detenido en ese momento.
El herido grave quedó ingresado en la UCI del Hospital Comarcal en estado de coma por traumatismo craneoencefálico grave, neumotórax y múltiples hematomas, con pronóstico crítico.
Cinco días después, el sábado 22, empeoró su estado, por lo que fue trasladado al Hospital Regional de Málaga, antiguo Carlos Haya.
Estaba durmiendo
Según las otras víctimas, esta persona se encontraba dormida y, antes de que les agredieran a ellos, los presuntos ladrones lo cogieron, uno por los brazos y otro por las piernas, y lo arrojaron al río, seco la mayor parte del año, desde una altura de poco más de 5 metros.
Los otros heridos sufrieron, en un caso, una fractura en su mano izquierda, y el otro policontusiones y una mordedura en la espalda.
De las investigaciones se hizo cargo la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV), que, tras una “ardua investigación”, pudo reunir pruebas suficientes para identificar al resto de los presuntos autores de los hechos y, posteriormente, establecer un dispositivo policial de localización y detención, que culminó tres días después con la detención de los dos identificados.
Los tres detenidos son de nacionalidad marroquí, uno de 27 años y los otros dos de 21, con 3, 4 y 2 detenciones anteriores respectivamente, que pasaron a disposición judicial por supuestos delitos de lesiones graves y robo con violencia.
La autoridad judicial decretó el ingreso en prisión de dos de ellos, ya que el primer detenido tuvo una participación pasiva, según el testimonio de dos de las víctimas.
