“Es una fiesta arraigada en nuestro país y en nuestra cultura”, ha defendido el vicepresidente primero de la Ciudad Autónoma, Miguel Marín
La polémica acerca de la corrida de toros que se celebrará el próximo 3 de septiembre a las 18:30h en la Plaza de Toros en Melilla aún sigue coleando en el debate público.
Después de que a principios de mes la consejera de Cultura, Fadela Mohatar, defendiera la legalidad de la contratación del festejo taurino de las críticas recibidas por la Fundación Franz Webber, este pasado fin de semana ha sido el vicepresidente primero del Gobierno local, Miguel Marín, quien ha pedido respeto para “los amantes del mundo del toro” en Melilla. “Tienen derecho una vez al año a disfrutar de la fiesta nacional”, ha defendido en declaraciones a los medios.
Marín ha dejado claro que el Ejecutivo central respeta “todas las sensibilidades”. “Y dentro de ese respeto esta la potestad que tiene el Gobierno de la Ciudad de llevar a cabo la fiesta nacional, como es el de la corrida de toros, una fiesta arraigada en nuestro país y en nuestra cultura”, ha agregado, apostando porque “se sigan manteniendo” en Melilla las “costumbres populares de nuestro país como son las corridas de toros”.
Manifestación antitaurina
Las declaraciones de Marín se produjeron un día después de que la plataforma ‘Melilla Antitaurina’ convocase una concentración el mismo día del evento taurino pero una hora antes, concretamente a las 17:30h, en la Avenida General Aizpuru.
Se trata de la cuarta concentración antitaurina que se realizará contra la celebración de este tipo de eventos desde que se retomaran en 2022.La corrida de toros en la Mezquita del Toreo se celebrará el 3 de septiembre a las 18:30h con la terna compuesta por Morante de la Puebla, Juan Ortega y Olga Casado
