Víctor Basadre, entrenador de la U.D. Melilla, destacó la intensidad y la competencia del encuentro hasta el último instante, pero sobre todo lamentó la dificultad de jugar con un jugador menos por la expulsión de Beka Kavtaradze en el minuto 23 de la primera mitad y cómo el equipo “logró mantener la compostura hasta el final a pesar de esa desventaja”. (Foto C.F. Intercity).
El técnico gallego del Melilla aseguró que el partido fue muy competido. “Como se ha podido comprobar, hasta los minutos de descuento, ha habido mucha intensidad, como todos los partidos de esta categoría y además contra un grandísimo rival”.
Sin embargo, asegura que el encuentro estuvo condicionado por la expulsión de Beka. “Eso ha supuesto jugar muchísimos minutos con un jugador menos ante un gran rival, con lo cual eso multiplica por mil las dificultades, pero a partir de ahí, creo que hemos intentado no perder la compostura y no perder el orden para que el partido no fuese por otros derroteros que nos hubieran posiblemente masacrado en otros aspectos”.
En este sentido, afirmó que saca la lectura positiva del encuentro, “ya que hemos sido capaces de competir, repito, ante un gran equipo con muy buenos jugadores, hasta el último minuto en inferioridad, pero evidentemente, al estar en inferioridad numérica concedes mucho terreno y situaciones de aproximación al área que hasta el momento en que estábamos once contra once no se estaban produciendo”.
“No sé si eso habría significado que el partido hubiese ido por otro camino, pero evidentemente cambió el plan inicial, como es lógico”, concluyó el nuevo entrenador del Melilla.
