El Atlético Melilla C.F. comenzará a preparar desde hoy martes su próximo compromiso liguero ante el Atlético Malagueño, que se disputará este sábado en el Campo Federativo de La Espiguera, a partir de las 13’00 horas. El conjunto de Said Hamad ha regresado de Guadix con un sabor agridulce con el empate un tanto, después de haber errado una máxima pena y anularle el árbitro un gol que hubiera supuesto el 0-2. Said Hamad, entrenador del conjunto melillense, indicó que sus jugadores están enfadados porque piensan que «deberíamos haber ganado», así que «hay que exprimir ese sentimiento para el próximo partido y afianzar el punto obtenido en Granada, pues con la misma actitud podemos superar al Atlético Malagueño».
Precisamente, sobre el encuentro disputado en tierras granadinas dijo que las sensaciones han sido muy buenas. «En defensa prácticamente no nos crearon problemas, jugando bien al fútbol, y en ataque dispusimos de varias ocasiones más para ganar con toda claridad, pero en líneas generales estoy muy contento por el trabajo que se ha hecho».
El entrenador del Atlético Melilla explicó que el partido no se ganó porque, una vez más, no hubo acierto a portería. «El Guadix tiró seis saquees de esquina y en uno de ellos marcó el gol del empate, en una acción ensayada en la que la verdad no pudimos hacer nada, mientras que nosotros llegamos bien hasta dentro del área, triangulando, pero sólo nos falta meter dos goles más que el rival».
«El punto evidentemente es positivo, pues todo lo que sea puntuar fuera de casa es importante, máxime en la situación en la que nos encontramos, pero no es positivo a nivel mental, ya que necesitábamos sumar los tres puntos, pero en esta ocasión hemos sacado un buen resultado a domicilio, aunque está claro que pudimos sacar algo más. No ha podido ser, pero el próximo sábado jugamos en casa y vamos a salir al cien por cien para que los tres puntos se queden aquí», resaltó.
Por otro lado, explicó lo sucedido en el gol que el colegiado le anuló a su equipo y que hubiera supuesto el 0-2. «El árbitro dio validez al tanto en un principio, pero lo anuló a instancias de su auxiliar, aunque al final del encuentro me reconoció que no vio posición antirreglamentaria de Melik. Fue un contragolpe rápido, en el que Melik salió bastante fuerte en la segunda parte, y le ganó la partida a la defensa, pero desafortunadamente el tanto no pudo subir al marcador».
Said Hamad está convencido que el próximo sábado puede caer la primera victoria desde que dirige al Atlético Melilla. “Por supuesto que podemos ganar, ya que jugamos en casa, pero como aficionado al fútbol me da envidia cuando voy a los campos de Andalucía, en los que veo a la afición que está con su equipo, llueva o haga frío, y en La Espiguera el ambiente está frío, cuando se dan cita unas doscientos personas. Parece como si hubiera un velatorio. Verdaderamente, tenemos gente pero no tenemos afición. Me gustaría que la afición nos apoyara ante el Atlético Malagueño porque sería un plus para animar a los jugadores. No le tenemos ningún miedo al Atlético Malagueño y los jugadores saben lo que deben hacer. Tienen confianza en sí mismo, empiezan a no dudar de su juego y eso es muy positivo antes de enfrentarse a un rival como el Atlético Malagueño. No nos debe preocupar el rival, sólo hacer bien nuestro trabajo dentro del terreno de juego», concluyó.
