El portavoz del Gobierno de Mustafa Aberchán y responsable de los actos lúdicos del Día de Melilla, José Megías, calificaba de "desmedidas" las críticas de la oposición al discurso del presidente de la Ciudad y recordaba que tampoco el año anterior en el acto institucional que venía celebrándose en Melilla la Vieja el 17 de septiembre, se puso una corona de laurel a los pies de la estatua de Estopiñán.
El delegado del Gobierno, Enrique Beamud, anunciaba que se tomarían las medidas necesarias sin que le temblase el pulso, en el caso de que se determinara la certeza de que un grupo de legionarios, en el último día de feria y en respuesta a que un compañero fue lesionado, atacó en plena madrugada a los vecinos de García Cabrelles, tal como denunciaron.