Este año se pondrá en marcha un programa para que unos 120 jóvenes que abandonaron los estudios de forma temprana puedan reengancharse a la enseñanza. El SEPE invertirá más de 500.000 euros a tal fin y el MECyD contratará al profesorado y gestionará el programa. La CEME está elaborando un estudio para conocer los certificados de profesionalidad más demandados. Los jóvenes recibirán formación básica, con la intención de seguir estudiando, obtener estos certificados y poder acceder a FP, aprovechando el Reina Victoria Eugenia. El pasado miércoles, tuvo lugar en la Dirección General de Formación Profesional, en Madrid, una reunión entre la subdirectora general de Formación Profesional del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECyD), la subdirectora general de políticas activas de empleo del Servicio Público de empleo Estatal (SEPE), el asesor jurídico del SEPE, el director provincial del MECyD, José Manuel Calzado, y la directora provincial del SEPE. Esther Azancot, dio ayer cuenta del resultado de dicha reunión. El objetivo del encuentro era sentar las bases para un convenio entre el SEPE y el MECyD con el fin de posibilitar la vuelta a la formación de jóvenes desempleados, aprovechando las posibilidades del Centro Integrado de FP Reina Victoria Eugenia.
Dicha formación comenzará por competencias básicas, como pueden ser inglés, matemáticas o lengua. Los cursos permitirán al alumno continuar con su formación en el centro integrado de FP, para obtener los diferentes certificados de profesionalidad a los que tenga acceso, de la misma forma que podrán seguir formándose para presentarse a las pruebas de acceso a los ciclos formativos, para acceder a la FP reglada, según explicó Azancot.
La directora provincial del SEPE explicó que este tipo de convenios ya están en vigor en algunas comunidades autónomas, aprovechando que los centros integrados pueden impartir formación en certificados de profesionalidad. El SEPE se encargará en Melilla de subvencionar la formación de los alumnos seleccionados y el MECyD de la contratación del profesorado y del desarrollo del programa. En concreto, el Servicio Público de Empleo reservará una partida que podría superar los 500.000 euros para este fin y que se pondrá en marcha este año. La intención es que puedan beneficiarse entre 100 y 120 jóvenes menores de 30 años, estableciéndose unas edades prioritarias que están por decidirse aún. Para saber qué certificados de profesionalidad tienen más demanda en la ciudad, ya se ha solicitado a la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) un informe. Y es que, la intención no es otra que mejorar las posibilidades de empleo de jóvenes que abandonaron la enseñanza de forma prematura. Cabe recordar que más del 80 por ciento de los desempleados de Melilla no tienen ni la ESO.
