El River Melilla C.F. continúa sin saborear lo que es ganar en la Liga, ya que ayer sábado volvió a perder, esta vez ante el Huétor Tájar por 0-2. Los granadinos fueron justos merecedores de la victoria, sobre todo en el segundo tiempo, en la que fue muy superiores a un conjunto local que tuvo sus opciones en la primera mitad. Precisamente, el primer tiempo fue de gran igualdad, con alternativas en el juego y en las áreas. Así, al minuto de juego, el local Abdulah se anticipó al portero visitante, pero su disparo se marchó fuera, por encima de la meta granadina.
La réplica del Huetor Tajar se produjo en el minuto 7, con un penalti cometido por Omar, que derribó a un delantero visitante, pero el propio meta local enmendó su error y detuvo el lanzamiento de Gadea.
Los melillenses se activaron tras esta acción y comenzaron a crear peligro ante la portería rival, aunque los andaluces perdonaron antes otra gran ocasión, en el 13’, en una internada de Joaquín por la banda izquierda, se plantó solo ante Omar, pero en vez de disparar pasó el balón al área, sin encontrar ningún rematador.
Las dos últimas oportunidades fueron para los melillenses, la primera en el 22’, tras un centro por la derecha que Simo remató alto, y la segunda en el 25’, en un disparo colocado de Abdulah que detuvo Rico.
En la reanudación, los visitantes fueron netamente superiores de principio a fin, sobre todo desde el momento en que se adelantaron en el marcador en el 52′. Joaquín centró desde la banda derecha y Alberto controló el cuero dentro del área, siendo derribado por un defensor. La pena máxima sí la convirtió esta vez el Huétor Tájar, por mediación de Mario.
Con el 0-1 en el marcador, el equipo granadino controló el partido perfectamente y desbordó al River Melilla por las bandas.
La sentencia a la victoria visitante llegaría en el 74′, cuando Joaquín profundizó sobre Cobos y éste, ante la salida de Omar, le batió de tiro raso y cruzado al palo izquierdo.
Los locales apenas pisaron el área en esta segunda, ya que fue un querer y no poder de sus jugadores.
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