Relacionados con un delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros. Hay al menos un detenido en un caso que está bajo secreto de sumario
La Guardia Civil está llevando a cabo este lunes una operación vinculada a un delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, en la que se están desarrollando registros en inmuebles en varios puntos de la ciudad.
Fuentes de la Delegación del Gobierno han precisado que la operación se encuentra bajo secreto de sumario.
Uno de los registros se ha realizado en una vivienda del número 6 de la calle General Prim, en pleno centro de Melilla, donde en la mañana de este lunes se ha podido ver a varios agentes encapuchados de la Guardia Civil entrando y saliendo del inmueble con cajas. En la zona había, además, varios vehículos de la unidad Fiscal y de Fronteras del instituto armado.
Otro de los registros se ha llevado a cabo en el Barrio del Industrial.
La Delegación del Gobierno únicamente ha confirmado que se trata de una operación de la Guardia Civil de Melilla vinculada a un delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros que se está desarrollando en diferentes puntos del núcleo urbano, sin precisar si se han llevado a cabo detenciones.
Sin embargo, otras fuentes, estas policiales, han detallado que se ha producido un detenido, que fue sacado esposado y con el rostro cubierto con una chaqueta del edificio de la calle General Prim. Al respecto, incluso han apuntado que se trataría de un joven camarero de profesión.
Tal y como recoge el Código Penal, “el delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros es el que, directa o indirectamente, promueva, favorezca o facilite el tráfico ilegal o la inmigración clandestina de personas desde, en tránsito o con destino a España, o con destino a otro país de la Unión Europea”, y, de ser hallado culpable que quien cometiera este delito, podría ser “castigado con la pena de cuatro a ocho años de prisión”.