Unión, Progreso y Democracia (UPyD) ha preguntado al Gobierno si está tomando alguna medida para garantizar que Alí Aarrás no esté siendo torturado, así como otros posibles presos extraditados por España. En una iniciativa parlamentaria, la diputada Irene Lozano recuerda que Aarrás es un ciudadano con la doble nacionalidad belga y marroquí que fue detenido en Melilla en función de las órdenes de detención internacional cursadas por Marruecos el 28 de marzo de 2008 por cargos relacionados con delitos de terrorismo y acusado de pertenecer a una red terrorista dirigida por Abdelkader Belliraj. El anterior Gobierno “aprobó finalmente su extradición el 19 de noviembre de 2010 y fue enviado a Marruecos el 14 de diciembre de 2010”, “como se temía, quedó recluido en régimen de incomunicación y sufrió tortura durante 12 días, del 14 al 24 de diciembre de 2010, en un centro de detención secreta de Témara, tal y como ha atestiguado el Relator Especial sobre la cuestión de la Tortura, Juan E. Méndez”.
