Unión, Progreso y Democracia (UPYD) considera que “ha llegado el momento de avanzar más” en la elaboración de un plan municipal de seguridad integral, con medidas como la aplicación de políticas de proximidad para que no se creen guetos y zonas incontroladas. El candidato de UPYD al Congreso de los Diputados en Melilla, Emilio Guerra, recordó que “invertir en seguridad es invertir en estabilidad en esta ciudad, que es vulnerable” y en la que todos deben ser “especialmente sensibles” a estas cuestiones relacionadas con la seguridad. El candidato de UPYD al Congreso de los Diputados en Melilla, Emilio Guerra, recordó que “invertir en seguridad es invertir en estabilidad en esta ciudad, que es vulnerable” y en la que todos deben ser “especialmente sensibles” a estas cuestiones relacionadas con la seguridad.
En este sentido, Guerra abogó por potenciar la Junta Local de Seguridad con la participación ciudadana a través de consejos de seguridad de barrio y elaborar un programa de prevención urbanística de zonas inseguras o de vandalismo urbano, que “tan de moda está últimamente en esta ciudad”.
El candidato upedista recordó que Melilla fue en 2015, junto con Murcia, la única ciudad española donde no bajó la tasa de delincuencia en el Balance de Criminalidad elaborado por el Ministerio del Interior, situando dicha tasa en la ciudad autónoma en un 56% por cada mil habitantes, 11 puntos por encima de la media nacional.
Además, señaló que los robos con violencia e intimidación subieron en Melilla un 12%, y un 22% los robos con fuerza, situándose la ciudad como la quinta autonomía con la tasa de criminalidad más alta de España.
Medidas nacionales
Guerra también desgranó algunas de las medidas nacionales que UPYD lleva en su programa en materia de seguridad, entre ellas la equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con las policías autonómicas y locales, que es “una vieja reivindicación y de justicia”, además de una pretensión “sensata, lógica y justa” de estos profesionales.
Asimismo, UPYD propone progresar en el estudio y diseño de la posible unificación de la Policía y la Guardia Civil en un cuerpo único, reformar el régimen disciplinario y no aplicar el código penal militar a los guardias civiles cuando no realicen funciones propiamente militares.
También incrementar los medios y la plantilla para las unidades de policía judicial y económica. “Debemos hacer un esfuerzo para dotar a nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para que tengan los instrumentos necesarios para luchar con eficacia contra la delincuencia”, señaló Guerra, que también propuso reservar la libre designación en casos extraordinarios para garantizar la despolitización, imparcialidad y neutralidad en los cuerpos policiales.
