El juez decano, Emilio Lamo de Espinosa, la fiscal jefa del Área de Melilla, María Rodríguez, el fiscal superior de Andalucía, Jesús García y el ministro de Justicia, Rafael Catalá, inauguraron este jueves la nueva Oficina Fiscal que supondrá una “reorganización interna” de la Fiscalía que permitirá una mayor “eficiencia”. Asimismo, ministro informó sobre las iniciativas legislativas que se están elaborando desde el ministerio a nivel de personal, material y nuevas tecnologías para la Justicia. El juez decano, Emilio Lamo de Espinosa, dio la enhorabuena a la Fiscalía de Melilla por la puesta en marcha del nuevo modelo de Oficina Fiscal, a la vez que dedicó unas palabras al ministro de Justicia, Rafael Catalá, a quien indicó que "no se olvidara de Melilla" ya que el sector judicial seguirá llevando a cabo su trabajo "que no es más que servir, porque la justicia ante todo es un servicio público".
Por su parte, la fiscal jefe del Área de Melilla, María Rodríguez, defendió que la inauguración de la nueva oficina es "un momento histórico" para una nueva organización que dará soporte a la actividad fiscal.
También, el fiscal superior de Andalucía, Jesús García, indicó que detrás de la nueva Oficina existe "ilusión y esperanza", por un nuevo modelo "más moderno" y que resuelva "las carencias del funcionamiento actual". De la misma manera, recordó la aprobación de la reforma en 2007 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal con el que "se hizo justicia histórica con esta Ciudad y se le asignó una fiscalía autónoma teniendo en cuenta el aspecto territorial". Por último, el fiscal de la región andaluza trasladó al titular de justicia que "cualquier dotación material o personal sabemos valorarla ya que conocemos las dificultades que atravesamos". A su vez, defendió que "los problemas de la justicia no son de los operadores sino de toda la sociedad".
El titular de Justicia, Rafael Catalá, valoró la puesta en marcha de la oficina Fiscal "pionera", al ser la segunda provincia donde se instala. Asimismo, indicó que el interés de agilizar la Justicia es compartido por todos para lo que anunció una serie de compromisos legislativos como es la Ley de Enjuiciamiento Criminal, de Enjuiciamiento Civil o la recién aprobada Ley de Segunda Oportunidad "para que las familias puedan continuar con una vida equilibrada incluso en el caso de fracasos económicos". A su vez, indicó que es "consciente de que hace falta medios materiales e incorporación de las nuevas tecnologías" por lo que se comprometió a que a partir del 1 de enero de 2016 "todas las comunicaciones entre la administración pública y los sectores judiciales sean solamente electrónicas" Con ello el ministro aseguró que pretende impulsar "sistemas telemáticos que ayuden a hacer nuestro trabajo propio más del siglo XXI y no del siglo pasado como en ocasiones lamentablemente estamos instalados con demasiada frecuencia". Asimismo, también anunció las nuevas plazas creadas hasta el momento y la nueva oferta que se publicara en pocos días con las que se quiere eliminar "el alto nivel de interinidad" y “consolidar el empleo”.
