Tragedia ayer en las playas de Melilla. Un joven, al parecer un inmigrante de origen magrebí, murió al mediodía por ahogamiento mientras nadaba cerca de la playa de San Lorenzo, fuera de la zona de baño, lugar cuya vigilancia no compete a los socorristas, que no obstante acudieron inmediatamente a su rescate tanto a nado como en una moto de agua. Aunque los servicios sanitarios del 061 intentaron reanimarlo durante más de una hora, finalmente el joven murió, convirtiéndose en el segundo fallecido en la playa este verano. Según informaron a MELILLA HOY fuentes policiales, los hechos ocurrieron pocos minutos antes de las dos y media de la tarde, cuando una mujer que estaba en la playa de San Lorenzo se percató de que a lo lejos, más allá de las boyas amarillas que delimitan la zona de baño, había un hombre pidiendo ayuda. La mujer avisó rápidamente a los socorristas, que acudieron al auxilio del hombre, tanto a nado como con una moto de agua y una zodiac. Aunque llegaron rápido, en apenas dos minutos, el chico ya se había hundido y los socorristas comenzaron a rastrear en el fondo para localizar el cuerpo, lo que consiguieron antes incluso de que llegara el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, al que dio aviso el puesto de socorro.
Tras sacarlo a la orilla, los servicios sanitarios del 061 estuvieron reanimando al hombre durante una hora y cinco minutos en la orilla, incluso con la ayuda de los socorristas, aunque no pudieron hacer nada por salvarle la vida. El suceso generó una gran expectación entre los bañistas y otros melillenses que ayer circulaban por el paseo marítimo, donde había un importante despliegue.
Las mismas fuentes indicaron a este Diario que por el momento se desconoce la identidad del fallecido, ya que no llevaba documentación. Sin embargo, sí encontraron entre sus pertenencias un parte médico correspondiente a un hombre de 39 años, si bien todo indica que no pertenecía a él, ya que el aspecto físico del fallecido era de unos 25 años, aproximadamente. Entre las opciones que se barajan está la de que pudiera ser uno de los numerosos inmigrantes magrebíes que ayer deambulaban por el centro con motivo de la recogida de las atracciones de feria.
El chico estaba solo en el momento de los hechos, aunque poco antes había estado con otros jóvenes a los que acababa de conocer, con los que había comido. Al terminar, se echó al agua en el dique del puerto deportivo para ir nadando en dirección a las playas interiores, junto a la red de medusas, momento en el que se sintió indispuesto.
Todo apunta a que sufrió un corte de digestión que le provocó un desfallecimiento, lo que desencadenó finalmente su muerte por ahogamiento. Minutos después, el juez de guardia ordenó el levantamiento del cadáver.
Es la segunda muerte en nuestras playas este verano, después de que un hombre falleciera por un infarto hace varias semanas.
